Foment lanza una ofensiva contra la presión fiscal en Cataluña y busca alianzas con la sociedad civil
La patronal catalana considera que la cantidad de impuestos pagados en la comunidad resta "competitividad" y "merma la capacidad adquisitiva de empresas y ciudadanos"
Foment del Treball quiere poner números a la cantidad de impuestos que pagan los catalanes en comparación con el resto de Comunidades Autónomas. La patronal catalana hace un llamamiento a la sociedad civil para crear un grupo de trabajo y elaborar un informe que exhaustivo sobre la fiscalidad en Cataluña, ya que considera que es «excesiva» respecto a otras regiones de España u otros países de la Unión Europea, lo que le resta «competitividad».
Según ha explicado el presiente de la entidad, Josep Sánchez Llibre, en una rueda de prensa, quieren ponerse en contacto con entidades, colegios sectoriales de Barcelona, expertos y organizaciones sociales de Cataluña para abrir un debate y redactar este documento «el máximo representativo posible». Esperan agrupar a más de 30 personas.
«Entendemos que, por responsabilidad, los presupuestos tenían que aprobarse, pero Cataluña tiene un incremento de presión fiscal sobre las empresas y ciudadanos excesiva», defiende el empresario, mientras añade que la comunidad «no vive aislada» y su sistema fiscal «merma la capacidad adquisitiva» de personas y sociedades.
Foment trabajará hasta principios de marzo para encontrar a todas las instituciones y personas que quiera adherirse a la comisión, antes de presentarla en sociedad. A partir de entonces, se pondrán manos a la obra y presentarán los primeros resultados del informe sobre el mes de octubre.
La comunidad con más impuestos propios
Según Foment, la Generalitat tiene aprobados 15 impuestos propios, a los que se sumará el de los cruceros, acordado en los presupuestos presentados la semana pasada. En otras regiones, como Madrid, no tienen ningún tributo propio, mientras que la media de la mayoría de territorios se sitúa entre los cinco y seis.
Además, el presidente de la entidad ha remarcado que, en el caso de los impuestos cedidos, los gravámenes del Govern son más elevados que en el resto de comunidades. «Cuando un catalán compra una vivienda usada paga un 66% más que cualquier ciudadano en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales«.
En las nuevas cuentas, el Govern de Pere Aragonés ha aceptado algunas subidas de impuestos pedidas por los Comuns, como el impuesto del patrimonio, el de los pisos vacíos, el de los cruceros y el de los alimentos ultraprocesados. Su impacto no será significativo, según apuntó la consellera de Economía, Natàlia Mas. Por ejemplo, el de las fortunas, que aplicará un tipo del 3,48% a los patrimonios superiores a 20 millones, solo recaudará 12 millones de euros.
Ultimando el recuso contra el de las grandes fortunas
Más allá de la fiscalidad comunitaria, Foment ha presentado el informe elaborado por el bufete Roca Junyent, donde se exponen los motivos jurídicos por los cuales el impuesto de las grandes fortunas podría ser inconstitucional. Según el documento, el tributo vulnera la autonomía financiera de las Comunidades Autónomas, ya que pisa la capacidad normativa del impuesto de patrimonio. La patronal también considera que supone una vulneración del principio de seguridad jurídica, en haberse tramitado como iniciativa legislativa de los grupos parlamentarios que conforman el Gobierno.
Esta misma tarde, la organización empresarial enviará el documento a la CEOE con el fin de encontrar o bien un grupo parlamentario o una Comunidad Autónoma que presente el recurso de inconstitucionalidad. Según ha apuntado su presidente, ya han hablado con varios interesados pero no tienen nada cerrado al 100%.