Foment exige a Aragonès unos presupuestos sin más impuestos
La patronal catalana pide al Govern que diseñe ya unas cuentas centradas en la recuperación económica de la pandemia. "Es impepinable", alertan
El empresariado catalán confía en que el nuevo curso sea el de la recuperación económica. Con ya el 70% de la población vacunada y a la espera del aterrizaje de los fondos europeos Next Generation EU, la patronal Foment del Treball urge ahora al Govern para que apruebe unos nuevos presupuestos que impulsen la salida de la crisis del coronavirus sin nuevos impuestos “discrecionales”.
La organización pidió a la Generalitat que consolidar la recuperación económica deber “la prioridad” en este momento. “Si priorizamos la recuperación económica es impepinable que necesitaremos nuevos presupuestos y es impepinables que estos presupuestos no se pueden aprobar subiendo impuestos”, avisó el secretario general adjunto y director de Economía, Salvador Guillermo.
El aumento de la competitividad es ahora la obsesión de la patronal catalana, por lo que el incremento de la presión fiscal sería contraproducente, aseguran. “Todo lo que no sea priorizar la atracción de talento sería un error; y si a finales de 2019 ya advertíamos la pérdida de competitividad, la situación ahora no es mejor”, añadió el directivo.
La organización que preside Josep Sánchez-Llibre hace meses que trabaja para que las empresas que trasladaron la sede social fuera de Cataluña en otoño de 2017 vuelvan, por lo que la política tributaria es un argumento importante para lograr el regreso. “Cataluña debe ser lo más atractiva posible y tener la máxima seguridad jurídica”, apuntilló Guillermo.
La guía es la Comunidad de Madrid. Como explicó Economía Digital, la comunidad presidida por Pere Aragonès cuenta con una quincena de tributos propios –y otros cuatro que fueron declarados inconstitucionales– frente a los cero de Madrid. La presidenta de la región, Isabel Díaz Ayuso, anunció la pasada semana la supresión de la totalidad de las tasas autonómicas.
De este modo, prorrogar los presupuestos actuales no es una opción. Las cuentas anteriores no contemplaban el impacto de la pandemia en la economía catalana.
La subida del salario mínimo
Foment del Treball también se refirió a la gran patata caliente de las negociaciones entre la patronal y los sindicatos: la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Salvador Guillermo pidió al Gobierno que las conversaciones se aplazasen al mes de enero, cuando la recuperación se hubiera afianzado y el número de ciudadanos afectados por un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) sea más bajo que ahora.
«Muchos países a nivel mundial están acelerando el proceso de competitividad y tenemos que ver si es el mejor momento o no, y de cuándo se puede hacer este aumento. Habrá que ver, lo lógico sería hacerlo cuando toca, lo lógico es de carácter interanual», advirtió.
El dirigente pidió seny tras años de subidas del SMI. En los últimos tres años, el incremento fue del 31%.
De la mano del aumento de los salarios podría acelerarse la tendencia del alza de precios que persiste desde febrero. Con los combustibles o la luz en máximos, la subida de las materias primas ya repercute en el coste de la cesta de la compra. Foment no considera por eso que haya riesgo de estanflación –la combinación de un bajo crecimiento con un crecimiento de la inflación–.