El FMI rebaja el crecimiento de España hasta el 1,1% en 2023

El Fondo Monetario Internacional achaca esta situación a los altos precios de la energía y de los alimentos, la dureza de las condiciones financieras y la debilidad de la demanda externa

Kristalina Georgieva, presidenta del FMI / EFE

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El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha rebajado el crecimiento económico de España hasta el 1,1% en 2023, aunque descarta una recesión. Asimismo, el FMI ha advertido de que el PIB no alcanzará su nivel previo a la pandemia a principios de 2024, retrasando así la recuperación económica española.

El FMI achaca esta situación a «los efectos de los altos precios de la energía y los alimentos, las condiciones financieras más estrictas y una demanda externa más débil», tal y como recoge en la actualización de sus previsiones para este año publicada este jueves.

En esta línea, señala que «la incertidumbre en torno a las perspectivas es significativa» con riesgos a la baja por las condiciones financieras más estrictas de lo esperado, una demanda mundial más débil y una mayor volatilidad de los precios de la energía.

Esperanza en los Next Generation

Así las cosas, el fondo apunta a la posibilidad de una mejora de la economía con un uso acelerado de los fondos Next Generation de la Unión Europea, el plan de recuperación de los daños ocasionados por la pandemia del Covid-19.

El fondo destaca que, durante 2022, España ha resistido gracias al fuerte repunte del turismo y otros servicios que han respaldado el crecimiento económico; así como los niveles de empleo, que han llegado a «superar el nivel previo a la pandemia».

Sin embargo, el FMI señala que «los elevados precios mundiales de la energía y los alimentos, el debilitamiento del crecimiento de los socios comerciales, el deterioro de la confianza de los consumidores y las empresas y el aumento de los tipos de interés han frenado la recuperación de la producción«.

Fotografía de alimentos en un supermercado.

En cuanto a la inflación, la institución que dirige Kristalina Georgieva prevé que la inflación se modere este año con una tasa media del 3,7%, lo que supone ocho décimas menos de lo previsto en su última actualización. Respecto a la inflación subyacente, la que no tiene en cuenta ni los productos energéticos ni los alimenticios por considerarlos volátiles, el FMI destaca que se mantendrá «por encima del 6% debido a un traspaso gradual de mayores costos de energía a precios más amplios»

Frenazo del mercado laboral

En cuanto al mercado laboral, el fondo prevé que sufra un frenazo con un crecimiento de apenas medio punto, frente al crecimiento del 3,1% que estima en 2022. Así, la tasa de paro se estancará en 12,8% al largo de este año, mientras los costes laborales de las empresas crecen un 4,5%, 1,1 puntos más de lo que lo hicieron en 2022.

Raquel Navarro Pérez

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