Fitch pasa tijera al Reino Unido y a la banca española y alemana
Fitch rebaja el rating del Reino Unido, confirma el de EE.UU. y también presiona a las entidades españolas, entre ellas al Santander, BBVA o Caixabank
Si hasta el momento las agencias de calificación habían dado una tregua a España por la pandemia del coronavirus, Fitch comienza a romper esta tendencia dando toques a grandes y no tan grandes bancos españoles por la epidemia, pero no solo a ellos. La agencia de calificación lleva varios días de intensa actividad y no está dejando títere con cabeza por la crisis del coronavirus. El movimiento más relevante en las últimas horas ha sido rebajar la nota de crédito a Reino Unido.
«La rebaja refleja un debilitamiento significativo de las finanzas públicas del Reino Unido causado por el impacto del brote de Covid-19 y una postura de aflojamiento fiscal que se instigó antes de que la escala de la crisis se hiciera evidente», apunta en su análisis. En contraste, por el momento no ha tocado la nota de Estados Unidos. Al país que preside Donald Trump le ve mayores fortalezas que al que lidera Boris Johnson.
«La calificación soberana de Estados Unidos está respaldada por fortalezas estructurales que incluyen el tamaño de la economía, el alto ingreso per cápita y un entorno empresarial dinámico. Estados Unidos se beneficia de la emisión del dólar estadounidense, la moneda de reserva preeminente del mundo, y de la flexibilidad financiera extraordinaria asociada», señalaba hace unos días la agencia de calificación.
Los bancos, en el epicentro de la crisis
En medio de la polémica sobre la falta de acciones coordinadas contundentes por parte de Europa, Fitch no hace distinciones significativas entre bancos españoles o alemanes. De acuerdo con Europa Press, la agencia de calificación rebajó el viernes la perspectiva del rating a entidades como Santander o Caixabank y habría puesto en vigilancia negativa a BBVA, Sabadell o Bankia a causa del impacto económico de la crisis del Covid-19, pero también ha aplicado la tijera a entidades germanas, entre ellas al Deutsche Bank o al Commerzbank.
El gigante germano se enfrenta a un nuevo ciclo de inestabilidad económica sin haber finalizado todo su plan de reestructuración; algo que la banca española sí ha hecho en los últimos ejercicios. De hecho, Fitch reconoce este esfuerzo en su informe sobre la banca española.
«Los bancos españoles entran en este período de crisis después de mejorar sus fundamentos crediticios en los últimos años. En particular, han mejorado su capital, reducido los activos problemáticos», apunta. «Los bancos españoles han pasado por varios ciclos de reestructuración desde las últimas crisis, reduciendo con éxito el exceso de capacidad y mejorando la eficiencia operativa», añade.