El euríbor vuelve a positivo seis años después y adelanta más subidas de las hipotecas
El índice de referencia de las hipotecas variables se situó este martes en el 0,05%, nivel inédito desde enero de 2016
Por primera vez en más de seis años, el euríbor a 12 meses, es decir, el principal índice al que se referencian las hipotecas a tipo variable, ha entrado en terreno positivo. Así, el euríbor se situó este martes 12 de abril en el 0,05%, un nivel que no tocaba desde el 11 de enero de 2016.
La guerra de Ucrania ha terminado desembocando en el adiós al euríbor negativo. La inflación provocada por la invasión rusa de Ucrania, lo que ha disparado el precio de la energía, y las subidas de la deuda soberana, ha llevado al Banco Central Europeo a adelantar sus previsiones de subidas de tipos.
De hecho, se espera que el BCE dé este jueves la pista definitiva de la subida de tipos en la reunión de su consejo de gobierno. Aun así, el mercado y los bancos ya descuentan una subida, por lo que el euríbor no deja de ascender.
Concretamente, el euríbor ha pasado de iniciar el año en el -0,5% a entrar en terreno positivo en menos de tres meses. Sin embargo, la tasa provisional de abril aun se mantiene en terreno negativo, en el -0,057%, aunque por encima del -0,237% de marzo.
Con esta subida, aquellos que tengan que revisar la hipoteca a cierre de abril verán como sus cuotas se encarecen, dado que hace un año el euríbor cerró en una tasa media del -0,484%.
El euríbor, seis años bajo cero
El euríbor entró en negativo en febrero de 2016 por primera vez en la historia ante la política ultra expansiva del BCE para apuntalar la recuperación en la zona euro y acumula más de seis años instalado por debajo del 0%.
Tras el mínimo histórico del -0,518% que marcó en su tasa diaria el 20 de diciembre 2021, el Euríbor a 12 meses empezó a subir, aupado por el cambio de discurso de la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, que se ha mostrado decidida a subir los tipos de interés por la escalada de la inflación en Europa y la crisis energética derivada de la guerra entre Rusia y Ucrania.