España espera precios de la luz más baratos en 2023, aunque con fuertes variaciones
Los expertos asumen que el precio debería estar en el entorno de los 120-130 €/MWh en 2023, aunque la volatilidad será la tónica
La predicción sobre los precios de la luz deja a todos los expertos con la misma sensación de incertidumbre que ha existido en 2022. De hecho, los datos lo demuestran. En España, el precio mayorista de la luz ha variado entre los casi 0 €/MWh que se ha llegado a marcar en diciembre, a los más de 700 €/MWh con los vaivenes del gas. La sensación generalizada es que habrá una ligera bajada.
Este año la media del mercado mayorista ha sido de 167 €/MWh. Para 2023, y según las fuentes consultadas por ECONOMÍA DIGITAL, se espera que esa media a final de año esté en el entorno de los 120-130 €/MWh. Aunque hay demasiados factores que harán que dicha media pueda ser muy variable y, sobre todo, que haya meses con precios muy elevados, y otros donde caiga más de lo previsto.
Uno de los principales factores y que, sobre todo, afectará a las señales de precios, tiene que ver con la ‘excepción ibérica‘ y todo lo relacionado con el gas. A finales de mayo decae el mecanismo que pone un tope a los precios que pueden cobrar las energéticas por el gas que se usa para generar electricidad. Así, a la espera de que haya prórroga o no, el verano será un punto caliente para medir la evolución.
Asimismo, los propios precios del gas en sus mercados de referencia, tanto el Mibgas como el TTF, serán clave para entender su evolución. Y aquí, otro factor importante, será lo que pueda pasar con el conflicto bélico de Ucrania. De igual modo, cuando en verano haya que revisar los almacenamientos de gas, también podrá haber fluctuaciones muy severas de precio.
Todo eso provoca, por lo tanto, que se den continuos altibajos en las cotizaciones del gas, que, posteriormente, afectan a la conformación de precios del mercado eléctrico. Y sobre todo, el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, ya ha manifestado en alguna ocasión que no es muy optimista con respecto al gas.
El elemento ‘X’
En esta encrucijada de cómo será el precio mayorista de la electricidad para 2023 hay un factor clave: las renovables. Las grandes bajadas de precios se producen en días de gran eolicidad o mucho sol. Es decir, cuando la energía eólica o fotovoltaica sacan todo su partido, más el recurrente uso de la nuclear, provoca que los precios se hundan.
Se espera que en los próximos meses entren muchos MW en el sistema eléctrico, pese a los problemas administrativos que siempre acompañan a estas tecnologías. Esta situación provoca que los precios siempre sean más baratos. Claro está, si la situación meteorológica acompaña.
Algo que se aplica la tecnología hidráulica. El pasado 2022 ha sido un año especialmente malo, lo que ha provocado que los ciclos combinados de gas hayan tenido más uso del necesario en otros momentos. Sin embrago, se prevé que sea un año hídrico algo más activo, por lo que será una ayuda a la hora de no necesitar gas. Aunque se trata de un arma de doble dilo, puesto que este tipo de centrales hidráulicas a veces marca unos precios más altos que el propio gas.
Los futuros, poco optimistas
Por lo que respecta al mercado de futuros, sin embargo, no son tan optimistas. Desde el Meff estiman que los precios podrían estar por encima de los 150 €/MWh durante casi todo el año.
Estas estimaciones, señalan los expertos consultados, suelen ser más prudentes porque tienden a introducir señales de precio muy conservadoras. Sin embrago, la tendencia general es que 2023 dará un leve respiro, aunque estará marcado por completo por una alta volatilidad.