España lidera con las repúblicas bálticas el récord de inflación en la zona euro
La Eurozona marcó su récord histórico de inflación en diciembre, con una tasa del 5%, liderando España el avance entre las grandes economías del euro, con un IPC del 6,7%, por la luz y los alimentos
En la imagen, personas comprando en un supermercado.
La sombra de la inflación acecha a toda Europa que mira con lupa los datos de evolución de los precios cada mes ante la presión de la crisis energética y de suministros internacional, que ha llevado la tasa de inflación interanual de la zona euro al récord histórico del 5% en diciembre, con España y las repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Lituania) a la cabeza.
La Oficina Estadística de la Unión Europea (Eurostat) ha confirmado que el año 2021 concluyó con el mayor incremento de los precios en la Eurozona desde que hay registros, según los datos publicados este viernes, que sitúan a España entre los países europeos con una mayor tasa de IPC, al escalar la inflación española al 6,7%, lo que supone 1,2 puntos más que en noviembre (5,5%) y por encima de las ya de por sí altas cotas de octubre (+5,4%) o septiembre (+4%), por no hablar de la tasa del -0,6% con la que concluyó 2020.
De hecho, la inflación de España en diciembre es la mayor en los últimos 29 años, al no registrarse datos similares desde 1992, como consecuencia del encarecimiento de los precios de la electricidad y los carburantes y, en menor medida, de la alimentación.
De esta forma, la escalada de los precios de España solo se ve superada por la de las repúblicas bálticas —Estonia (+12%), Lituania (+10,7%) y Letonia (+7,7%), afectadas en mayor medida por la crisis energética, y la inflación nacional es mayor que la registrada por las otras grandes economías del área del euro, como Alemania (+5,7%), Francia (+3,4%) o Italia (+4,2%).
Alimentos frescos y energía disparan la inflación en el área euro
El récord histórico del 5% de inflación en la zona euro, una décima más que en noviembre y muy lejos de la tasa del -0,3% con la que cerró 2020, obedece principalmente al repunte del precio de la energía, a pesar de que se moderó ya algo, al 26% desde el 27,5% marcado. en noviembre.
El otro componente que determinó el histórico alza interanual de los precios fue el coste de los alimentos frescos, que aumentó al 4,6% en diciembre, frente al 1,9% del mes previo, al tiempo que los alimentos procesados, el alcohol y el tabaco se encarecieron un 2,8%, cinco décimas más.
Asimismo, los precios industriales no energéticos se elevaron un 2,9%, cinco décimas más, a diferencia de lo sucedido con los precios de los servicios, que se moderaron en tres décimas, hasta una tasa del 2,4% el último mes del ejercicio 2021.
El notable peso de la energía en los precios se constata en el dato de inflación excluyendo este componente, que se situó en el 2,8% en diciembre, si bien subió igualmente tres décimas más, mientras que la tasa de inflación subyacente, que excluye el efecto de los precios de la energía y los alimentos frescos por ser los más volátiles, continuó por segundo mes en máximos del 2,6%.
