Escrivá cambia su propuesta de cotización de autónomos: cuotas de entre 214 y 991 euros
Podemos y las organizaciones rechazan la propuesta: ATA lo ve "inaplicable" y UPTA y Uatae rechazan que se baja en casi 300 euros la cuota a los que más ganan respecto a la anterior propuesta y se suba en 30 euros a los que menos ganan
El Ministerio de Seguridad Social ha cedido ante la presión de las organizaciones de autónomos, como ATA, en la negociación para el nuevo sistema de cotización por ingresos reales de los autónomos que regirá desde 2023, al plantear una nueva propuesta con un nuevo cálculo sobre los ingresos reales que tendrá en cuenta los rendimientos netos y descontando de lo mismo las deducciones de amortizaciones y las provisiones.
Los nuevos tramos propuestos al final del periodo 2031 fijan una horquilla de cuotas de entre 214,2 euros y 991,44 euros, frente a la anterior de entre 183,6 y 1.266,66 euros, al elevarse en 30,6 euros para los que menos ganan, disminuir en los intermedios y reducirse en más de 275,2 euros para los que más ganan respecto al esquema anterior, según la nueva propuesta a la que ha tenido acceso Economía Digital.
La propuesta ha sido trasladada en la reunión mantenida este martes entre el equipo del Ministerio de José Luis Escrivá, las principales organizaciones de autónomos (ATA, UPTA y Uatae) y los agentes sociales (empresarios y sindicatos), para la configuración del nuevo sistema de cotización de los autónomos que regirá a partir de 2023, en un contexto en el que la negociación permanecía atascada al no registrarse avances, más allá del intercambio de datos técnicos por parte del Ministerio de la Seguridad Social, que estima que actualmente hay 200.000 autónomos exentos de realizar la declaración de la Renta.
El Ministerio ha planteado un nuevo cálculo de los rendimientos netos para la determinación de los ingreso reales, de forma que no se incluirán ni las deducciones de amortizaciones ni de provisiones. El cálculo será por tanto el rendimiento neto más cuota a la Seguridad Social menos un 5%, explican las mismas fuentes.
Las organizaciones de autónomos rechazan en bloque la nueva propuesta: ATA lo ve «inaplicable» al dejar fuera al 40% de autónomos entre societarios y colaboradores y propone una reforma por fases a la espera de que la Agencia Tributaria recabe toda la información, mientras que UPTA y Uatae piden bajar cuotas a autónomos con menos ingresos y subir a los de mayor renta.
También ha sido rechazada por la facción del Gobierno de Unidas Podemos, ya que el portavoz del grupo parlamentario, Pablo Echenique, se ha mostrado contundente al señalar que la propuesta inicial ya era «inaceptable» y que no aceptarán ni. apoyarán «semejante cosa», en referencia a la propuesta de bajar cuotas a los autónomos que más ganan y subirlo a los que menos perciben. El rechazo se encuadra en la guerra fiscal que mantienen abierta PSOE y Unidas Podemos, después de que la formación ‘morada’ plantease una reforma fiscal sin esperar a los resultados del comité de expertos designado por el Ministerio de Hacienda, algo que la ministra socialista María Jesús Montero calificó de «inapropiado». De hecho, este martes en el Congreso el PSOE vota en contra de la iniciativa fiscal de Podemos.
Las nuevas cuotas: de entre 214 y 991 euros
En cuanto a la reformulación de los tramos, se proyecta un nuevo planteamiento que da más cobertura y menos cuota a los tramos intermedios, planteando una horquilla para el final del periodo (2031) de entre 214,2 euros y 991,4 euros, frente a la anterior de entre 183,6 y 1.266,66 euros.
Según la propuesta del Ministerio, a la que ha tenido acceso Economía Digital, el Gobierno mantendría la tarifa plana de 70 euros para la base mínima y respecto a la anterior propuesta elevaría la cuota a los autónomos con unos rendimientos inferiores a 700 euros, que pagarían 214,2 euros (antes proponía 183,6 euros), y la mantendría en los 244,8 euros para aquellos con unos rendimientos de entre 700 y 800 euros.
Bajaría en cambio para los tramos intermedios: los autónomos con unos rendimientos de entre 700 y 900 pagarán una cuota de 264,55 euros (antes 293,94 euros); con rendimientos de entre 1.125,9 y 1.300 euros una cuota de 316,71 euros (antes 351,9 euros) y aquellos con rendimientos de entre 1.300 y 1.500 euros una cuota de 392,95 (antes 413,1 euros).
Los tramos superiores se mantendrían, de forma que los autónomos con una cuota de 474,3 euros para los autónomos con rendimientos entre 1.500 y 1.700 euros; de 535,5 para los de entre 1.700 y 1.900; de 596,7 euros entre 1.900 y 2.330 euros; de 728,28 euros para entre 2.330 y 2.760; de 859,86 entre 2.760 y 3.190 y finalmente de 991,44 euros de cuota para autónomos con rendimientos a partir de 3.190 euros. Se eliminarían por tanto los dos últimos tramos que se planteaban antes, que fijaban una cuota de 1.123 euros para autónomos con rendimientos de entre 3.620 y 4.050 y una cuota de 1.266,66 euros para los que ingresasen más de 4.050 euros mensuales.
La primera propuesta del Gobierno establecía un sistema progresivo que se aprobaría antes del 30 de junio de 2022 para aplicarse gradualmente desde 2023 durante nueve años de transición, que se evaluaría cada tres ejercicios, y que conllevaría flexibilidad con 13 tramos desde un suelo (base de cotización) de 184 euros al mes para aquellos que ganan 600 euros o menos al mes hasta una máxima de 1.267 euros para aquellos con una base de cotización de 4.050 euros o más. Se fijaría la posibilidad de realizar hasta seis cambios de tramos al año.
Rechazo en bloque: ATA lo ve «inaplicable»
El presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha mantenido el rechazo de su organización al nuevo planteamiento del Ministerio, al calificar de «barbaridad» la situación actual por la que un autónomo que gana 400 euros paga 294 y la idea de que pase a pagar 214.»Llegar a esta reforma del RETA es hacer un pan sin tortas», ha apuntado Amor, quien ha explicado que «el problema no está en los tramos», sino en querer «empezar la casa por el tejado».
Amor ha precisado que hay 1,5 millones de autónomos con rendimientos cero, la inmensa mayoría son autónomos societarios y autónomos familiares colaboradores de los que. Hacienda no dispone de sus datos de rendimientos de actividades económicas. «Cuando la Seguridad Social ha comunicado el DNI de esos autónomos societarios no les aparecen los rendimientos de actividades económicas porque ese rendimiento no aparece en el DNI de los autónomos societarios, sino en el CIF que empieza por una letra de la sociedad que tiene el autónomos societario.
De esta forma, «no se puede crear un sistema por ingresos reales con más de 900.000 autónomos societarios o 200.000 autónomos colaboradores que no tienen rendimientos de actividades económicas», ha concluido Amor, apuntando que sí lo tienen la sociedad en el caso de los autónomos societarios y el autónomo principal en el caso de autónomos colaboradores. «Antes dijimos no al sistema de tramos y volveremos a decir no: el principal problema es que este sistema deja fuera a un 40%. Necesitamos tener los datos; se ha intentado este sistema desde 2008 y es inaplicable en la situación de heterogeneidad que tiene el RETA, que no solo integra a autónomos personas físicas. Seguiremos hablando y negociando pero tiene que tener otra solución a lo que ponen encima de la mesa», ha zanjado.
De cualquier forma, desde ATA señalan que ante el diagnóstico actual del colectivo de trabajadores por cuenta propia y su elevada heterogeneidad no se podrá fijar «en ningún momento» un sistema que «no se equivoque y no cree distorsiones». Por ello, en ATA consideran que mientras que se reordena el RETA y se recaban todos los datos de los colectivos en función de la mayor información que pueda aglutinar la Agencia Tributaria en los próximos años será «muy difícil» instaurar un sistema basado estrictamente en los ingresos reales.
Así las cosas, ATA plantea una reforma «faseada» en función de la calidad de la información que se vaya obteniendo de la AEAT para establecer un sistema de cotización por ingresos. Por el momento queda a la espera de recibir y analizar la nueva propuesta del Ministerio para proceder a realizar una contrapropuesta.
UPTA marca la línea roja de bajar cuotas a rentas bajas y subir a altas
A falta de conocer el detalle, el presidente de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Eduardo Abad, también rechaza la nueva propuesta al verla «insuficiente». La organización defiende que haya un «ahorro sustancial» para autónomos con rentas del trabajo bajas, de forma que aquellos con rentas de 8.400 euros se ahorren 960 euros al año; los de rentas de 10.800 euros ahorren 600 euros y aquellos con rentas de hasta 13.500 tengan un ahorro de 360 euros anuales.
Abad también ha avanzado que UPTA va a exigir para los autónomos con rendimientos de 8.400 euros al año que el sistema protector se alargue a los cuatro años, de forma que se alargue la protección social en su base de cotización de 960 euros para aquellos con rendimientos de 700 (su base sería de 700 euros).
Igualmente, ha mostrado su disconformidad con que el tramo superior de la tabla se quede en 38.280 euros al año, según la última propuesta del Ministerio de Seguridad Social. Abad defiende que los tramos superiores deben hacer un mayor esfuerzo contributivo para que los inferiores puedan reducirlo. UPTA seguirá trabajando para conseguir una negociación «fructífera» y se logre un «ahorro sustancial» para las rentas más bajas, mientras que las más altas tengan que hacer un esfuerzo contributivo superior.
Uatae: rechazamos que se perdonen 500 millones al año a los tramos más altos
En una línea similar, el portavoz de Uatae, Curro Corrales, ha mostrado el rechazo de la organización a la propuesta de subida de la cuota mínima hasta los 214 euros para quienes ganen menos de 700 euros y que se rebaje la cuota en casi 300 euros para los que más ganan, estimando que ello supondría un ahorro de 500 millones de euros al año a los tramos más altos para subirle a cambios a los tramos más bajos.
«Va contra la filosofía del sistema, no podemos consentirlo», ha avisado Corrales, quien ha indicado que Uatae estudiará la propuesta y seguirá negociando para lograr un acuerdo para los 3,3 millones de trabajadores autónomos pese a estar en este instante «lejos» del acuerdo.
El portavoz ha valorado que, a falta de conocer la letra pequeña, se de un «avance» en la determinación de los beneficios netos reales, incluyendo amortizaciones y algunas deducciones, pero ha mostrado su preocupación porque el Gobierno siga sin detallar cómo se va a mejorar la protección social del colectivo en materia de pensiones o prestaciones.