El 86% de los nuevos empleos juveniles tras la reforma laboral son fijos discontinuos

Los contratos fijos discontinuos han tirado del empleo juvenil que se ha creado en los 16 meses en vigor de la reforma laboral.

España tiene unos 2,85 millones de personas en el paro. Foto EFE

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Cerca de nueve de cada diez nuevos empleos de menores de 30 años creados entre enero de 2022, primer mes en vigor de la reforma laboral, y abril de este año han utilizado la modalidad del contrato fijo discontinuo, de acuerdo con los últimos datos de la afiliación a la Seguridad Social.

Así, de los 265.544 nuevos afiliados desde enero de 2021 entre los 16 (edad legal para comenzar a trabajar, con permiso de los tutores legales) y los 29 años, 228.863 se han sumado a la Seguridad Social con esta figura que impulsó la última reforma laboral en detrimento de los contratos temporales. Esto es, el 86% de los empleos creados en esas franjas de edad.

Los datos de afiliación media de la Seguridad Social muestran que, entre enero de 2022 y abril de 2023, al menos 40.066 jóvenes de entre 16 y 19 años; 131.684 de entre 20 y 24; y 93.794 de entre 25 y 29 han sido dados de alta como empleados en el sistema de la Seguridad Social.

En este mismo periodo, se han sumado al régimen general 27.395 fijos discontinuos de entre 16 y 19 años; 107.050 de entre 20 y 24 años y 94.418 en la franja hasta los 29 años.

Este último dato es curioso porque se han sumado al régimen general más fijos discontinuos de entre 25 y 29 años que el empleo total creado desde enero de 2022, lo que puede deberse a movimientos entre los distintos regímenes que componen la Seguridad Social, así como altas y bajas del registro de afiliación media.

Menos temporales, más discontinuos

La potenciación del uso de la figura del fijo discontinuo en la reforma laboral de finales de 2021 ha sido controvertida. Pensado para los supuestos de un trabajo estacional, como los temporeros o puestos vinculados al sector turístico o la educación, dota de cierta estabilidad a los trabajadores, ya que cuentan como plantilla de las empresas y están obligadas a recurrir a ellos cuando las necesidades de producción lo exijan.

Sin embargo, la polémica viene por su contabilización dentro de los datos del Servicio Público de Empleo, donde no aparecen como parados, pese a que en ese momento no estén trabajando, sino como demandantes con relación laboral, por lo que salen de las cifras del paro registrado. En las cuentas de la Seguridad Social sí se les da de alta en el momento en que se ‘reactivan’ y vuelven a trabajar.

El Gobierno ha defendido con vehemencia la decisión de potenciar esta figura, frente a críticas de la oposición y algunos expertos que cuestionan el, a su juicio, ‘maquillaje’ estadístico. El secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez, restó importancia al peso de esta modalidad dentro de los datos de empleo: apenas representan el 7% dentro del total de contratos.

“Uno de los objetivos de la reforma laboral era eliminar la contratación temporal, que es mucho más precaria, por la estabilidad en determinadas actividades que tienen una cadencia temporal”, detalló este jueves. “Una intermitencia que explica que no se realicen contratos indefinidos a tiempo completo, pero que tenga un componente de estabilidad”, abundó el ‘número dos’ del Ministerio que dirige José Luis Escrivá.

«Una forma de contratación más»

A juicio del director de The Adecco Group Institute, Javier Blasco, la figura va a “socaire” de la marcha de la economía. “Se está utilizando como una forma de contratación temporal más, con tasas de incertidumbre o precariedad más potentes que los contratos llamados precarios, como el de obra o servicio”, ha señalado en conversación con Economía Digital.

De acuerdo con los datos de empleo de abril, que marcaron el segundo mejor registro de la serie histórica, cerca de la mitad (44,6%) de los 238.436 nuevos empleos creados fueron fijos discontinuos: 106.506 trabajadores más en esta modalidad se sumaron en comparación con marzo.

Mientras, Trabajo ya ha avanzado que las tareas para depurar las cifras del paro registrado con una contabilización de los fijos discontinuos en actividad están muy avanzadas y podrían adjuntarse, como pronto, en la próxima convocatoria o entrado el verano.

Álvaro Celorio

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp