El Santander imita la estrategia en consumo de Caixabank
El banco presidido por Ana Botín acelera su apuesta por el crédito al consumo con la financiación de móviles, un segmento en que ya operan Caixabank o BBVA
La presentación de resultados del tercer trimestre ha sido un antes y un después para el Banco Santander. Desde que publicara sus números el pasado 30 de octubre, el primer banco español se ha centrado en dar una vuelta a su estrategia comercial para impulsar sus ingresos en Europa.
Además de decir adiós a su producto estrella, la Cuenta 1,2,3, el banco ha alcanzado una alianza con Telecom Italia para entrar en el negocio de venta de móviles financiados: un área en el que Caixabank ya opera en solitario y aprovechando su red desde hace meses y en el que, más tímidamente, también se mueve BBVA.
La entidad presidida por Ana Botín ha optado por la creación de una joint venture con la teleco italiana, de la que ostentará el 51% del capital, y que diversificará el negocio de Santander Consumer Finance (SCF), más especializado en la comercialización de crédito para la financiación de vehículos. El motor es uno de los sectores que se están viendo afectados por la guerra comercial, aunque durante la rueda de prensa de resultados, José Antonio Álvarez, consejero delegado del banco, insistió en la buena marcha de sus alianzas, ya que, según explicó, las firmas con las que trabajan estaban logrando ganar cuota de mercado.
Su pacto con Telecom Italia se sumaría, además, al lanzamiento de una ofensiva para elevar su cartera de crédito a pymes, con préstamos preconcedidos. En un contexto de parón en el mercado hipotecario y tipos negativos, la financiación a empresas y el crédito al consumo han emergido como las dos vías para tratar de crecer en el negocio más tradicional bancario. De hecho, en términos generales el crecimiento en volúmenes del conjunto del sector en el tercer trimestre se sostuvo sobre este tipo de créditos, mientras que cayó en hipotecas.
El Banco Santander ya tiene experiencia en la financiación de la compra de productos, aunque de forma indirecta. También a través de Santander Consumer Finance controla el el 51% de Financiera El Corte Inglés, que explota la tarjeta de El Corte Inglés y que opera tanto en España como en Portugal. El banco adquirió la posición de control al grupo presidido por Marta Álvarez en 2014.
Los Amazon de la banca
Caixabank y BBVA llevan meses ensayando la fórmula del Santander, pero a través de la puesta en marcha de sus propias tiendas on-line. Ambas entidades han dado vida a sitios en Internet especializados en la venta financiada de productos (PromoCaixa/CompraEstrella y Decomprasbbva), al principio ligados a la tecnología, y cada vez con una gama más amplia.
El banco liderado por Gonzalo Gortázar ha ido algo más allá porque también ha puesto en marcha una tienda en física en Málaga de productos al consumo, y sus oficinas son un escaparate para la comercialización de tecnología financiada; sustituyendo a las antiguas campañas comerciales de la banca, donde las hipotecas o los depósitos eran los reyes.
Caixabank se autodenomina como el “líder en soluciones en medios de pagos, financiación en punto de venta y comercialización de productos con financiación” y durante la presentación de resultados hasta septiembre, señaló que había vendido más de 240.000 productos de consumo, entre los que incluye TV o smartphones; más de 14.500 coches y 49.500 alarmas (comercializa y financia los dispositivos de Securitas Direct).
Al igual que BBVA, también está ampliando su gama de producto hacia la financiación de viajes.
Bankia es el próximo que prepara un salto en este segmento. Está previsto que la joint venture con Crédit Agricole especializada en préstamo al consumo vea la luz antes de la acabe el año. Por el momento, el banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri no ha adelantado exactamente en qué consistirá, pero durante la presentación de resultados trimestrales deslizó que sería una actividad que se realizaría fuera de las sucursales.
Tercer negocio por aportación en resultados
Durante los nueve primeros meses del año, Santander Consumer Finance generó 995 millones de beneficio para el Santander, un 0,2%. Es la tercera área de negocio por aportación de resultados, sólo por detrás de los 2.249 y los 1.185 millones que generaron Santander Brasil y Santander España.
La morosidad de SCF, además, es inferior a la del grupo financiero. Al cierre del tercer trimestre, se ubicaba en el 2,25%, frente al 3,47 del conjunto del grupo.