El Santander compensa a los accionistas del Popular con 764 millones
Banco Santander compensa con 764 millones de euros a los accionistas que acudieron a la ampliación de capital del Banco Popular en 2016
Los accionistas del Banco Popular han aceptado adquirir el 77,88% de los bonos de fidelización ofrecidos por el Banco Santander a los clientes minoristas que acudieron a la ampliación de capital que llevó a cabo el Popular en 2016 y perdieron toda su inversión al ser intervenida la entidad.
El Santander, que compró el Popular el pasado 7 de junio, tras la intervención, explica que una vez finalizado el plazo de aceptación de la oferta el pasado 7 de diciembre, los accionistas han adquirido un total de 7,64 millones de bonos de fidelización, por un importe de 764,03 millones de euros, lo que equivale al citado 77,88%.
La entrega de los bonos a los aceptantes de la oferta, tendrá lugar este viernes, cuando también está previsto que sean admitidos a negociación en el mercado de renta fija AIAF para su contratación a través del sistema electrónico de negociación de deuda (SEND) a partir del próximo 18 de diciembre.
Los bonos tienen una rentabilidad fija anual del 1%
Los bonos, que tienen una rentabilidad fija anual del 1% que se pagará trimestralmente, estaban dirigidos a unos 100.000 clientes minoristas, entre particulares y empresas, que compraron acciones de Popular entre mayo y junio del año pasado o determinadas obligaciones subordinadas del banco.
Estos «bonos de fidelización», que no requieren desembolso, obligan a renunciar a emprender acciones legales contra el Banco Santander. Los nuevos bonistas recibirán como compensación una cantidad que será del 100 % para quienes invirtieron hasta 100.000 euros en la citada ampliación de capital del Popular, y del 75 % para los que destinaron más de esa cantidad y hasta 500.000 euros.
Los bonos obligan a renunciar a emprender acciones legales contra el Santander
Si se trata de inversiones superiores, hasta un máximo de un millón de euros, la compensación será del 50%. Además de renunciar a emprender acciones legales, quienes deseen acogerse a este sistema de compensación tendrán que mantener una relación comercial «equivalente» a la que tenían cuando compraron las acciones o las obligaciones subordinadas.
Estos «bonos de fidelización», emitidos al 70% de su valor nominal, ofrecen un interés del 1% pagado trimestralmente durante los siete primeros años, a contar desde el próximo 15 de diciembre, respecto a su valor nominal vivo.
Los bonos serán obligaciones perpetuas emitidas por el Banco Santander, con 100 euros de valor nominal y se podrán amortizar a partir del séptimo año a voluntad de la propia entidad y con el visto bueno previo del BCE.
Y es que, desde el 15 de diciembre de 2024 en adelante, y cada quinquenio, los bonos ofrecerán una remuneración ligada al interés de las permutas financieras –mid swap– a cinco años más un diferencial de 594,7 puntos básicos sobre el nominal vivo en cada período de remuneración.