El impacto de la inflación podría alcanzar los 3.000 euros en los hogares españoles
Las expectativas de los consumidores empeoran de cara a la recta final del año, según la consultora KPMG
El impacto de la subida de precios podría alcanzar los 3.000 euros en los hogares españoles este año. Así lo refleja la estimación que ha elaborado KPMG a partir de datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Y es que, con un panorama económico marcado por una inflación sin precedentes, la subida de precios está afectando las partidas más básicas de los hogares españoles.
Precisamente, debido a esta situación, los consumidores están renunciando a gastos discrecionales para compensar las subidas de los gastos esenciales, manteniendo sus hábitos a costa de sus ahorros o de un mayor endeudamiento o cambiando sus preferencias en el consumo.
Una situación que está provocando que la confianza del consumidor se esté deteriorando y que sus expectativas también empeoren de cara al consumo en esta recta final del año, donde el comercio se juega gran parte de sus ventas en las jornadas de descuento como el ‘Black Friday’, ‘Día de los Solteros’ y ‘Cyber Monday’ o la campaña de Navidad y rebajas.
El consumidor se está volviendo especialmente sensible al factor precio
El socio responsable de Consumo y Retail de KPMG en España, Enrique Porta, ha avanzado que los consumidores encaran este tramo final del año altamente preocupados por la inflación, y vaticina que «aunque no prevén reducir el gasto», sí que deberán gestionar su presupuesto disponible, sus ahorros y su capacidad de endeudamiento.
Además, ha recordado que estos consumidores estarán «muy atentos» a los descuentos y promociones, por lo que en este año, marcado por la subida de precios, planificarán mejor sus compras, buscando las mejores ofertas que ofrezcan unas marcas que deberán proteger sus márgenes sin perder competitividad.
De esta forma, el consumidor se está volviendo especialmente sensible al factor precio, aunque no está dispuesto a renunciar a otros atributos ni a determinadas experiencias, ya que incrementa su exigencia medioambiental y social a las marcas.
Además, en este tramo final de año, marcado por el consumo, se cuela este año en el calendario de eventos el Mundial de fútbol, que por primera vez se disputará entre noviembre y diciembre, jugando también un papel importante en el consumo, ya que esta cita deportiva, una de las más seguidas a nivel mundial, hará que una parte del gasto de noviembre se derive a alimentación y bebidas al hogar y al ‘delivery’.