El Gobierno usa el PIB para camuflar la deuda desaforada de España
La deuda pública española alcanzó los 1,105 billones de euros a cierre del ejercicio 2016, aunque en términos relativos cayó debido al crecimiento del PIB
La deuda pública terminó 2016 en 1,105 billones, el 98,98% de producto interior bruto (PIB). Supone un repunte en términos absolutos con respecto al año anterior, pero una bajada en términos relativos. El Ministerio de Economía calcula los datos de deuda pública actualizados por el Banco de España tomando como base la previsión remitida a Bruselas con el plan presupuestario. El dato definitivo se conocerá el próximo 2 de marzo.
El regulador actualizó los datos de deuda pública con la información de diciembre, que acabó el 0,57% más que en noviembre y el 3,02% más que un año antes. De confirmarse la cifra, España habría cumplido «con margen» el objetivo del 99,4% marcado para este año, según Economía. El ministerio añade que este resultado consolida la tendencia a la baja de la deuda pública en términos relativos, ya que cerró 2015 en el 99,2% del PIB.
Las estimaciones remitidas a Bruselas prevén que la deuda de las administraciones públicas bajará en los próximos años. Representará el 99% del PIB en 2017, el 97,7% en 2018 y el 95,4% en2019. Los expertos advierten de que se da importancia a esta bajada en relación al PIB cuando el resultado no se corresponde realmente con un descenso del endeudamiento, sino con el crecimiento del PIB, debido al año positivo para la economía.
«Mientras haya déficit la deuda sigue aumentando», explica la investigadora de Funcas, María Jesús Fernández. Añade, «ya estamos en un nivel de endeudamiento peligroso». Aunque los tipos de interés son bajos «han tocado fondo y están aumentando», apunta la experta. Este volumen de deuda «nos puede suponer una carga en cuanto a intereses considerable» ante el previsible fin de la política expansiva del Banco Central Europeo (BCE).
Por su parte, el ministro de economía, Luis de Guindos, advierte sobre el riesgo que constituye para la economía española su elevado endeudamiento, tanto privado como público.»Nos hace especialmente vulnerables ante una subida de los tipos de interés», que «tendría un impacto negativo, rápido e intenso en los costes de financiación», concluye el ministro.