El Gobierno cambia su discurso fiscal por la epidemia
María Jesús Montero no descarta poner en marcha ayudas fiscales a las empresas si la economía afloja por el coronavirus, aunque por ahora descarta impacto
El coronavirus podría alterar los planes fiscales del gobierno de Pedro Sánchez. Según ha adelantado hoy la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el Ejecutivo estudiará implementar ayudas fiscales a las empresas «si el coronavirus se prolonga en el tiempo e impacta en la economía», de acuerdo con EFE.
En declaraciones a la prensa antes de participar en el Senado para defender el límite de gasto no financiero para 2020 y la nueva senda de déficit 2020-2023, Montero ha señalado que el Ejecutivo está preparado y «trabajando para estar listos» si el nivel de la epidemia se prolonga y sus consecuencias empiezan a notarse en la economía. No obstante, por el momento, la ministra descarta impacto económico. «Todavía no podemos hablar de que se note en el funcionamiento habitual de la economía», ha señalado.
Las declaraciones de la ministra se contextualizan en una jornada en las que el Eurogrupo ha adelantado que se pondrán en marcha medidas fiscales de forma conjunta para contrarrestar el impacto. «Nuestras reglas fiscales otorgan una flexibilidad ante eventos inusuales fuera del control del Gobierno», ha subrayado el presidente del Eurogrupo, Mário Centeno, que ha comparecido en Lisboa al término de una videoconferencia con los ministros de Finanzas del euro y otros de países de la Unión Europea (UE) que no comparten la divisa.
El portugués ha explicado que la reunión ha sido «una primera oportunidad para intercambiar información».
Europa reconoce que sufre la economía global
«El brote (de coronavirus) está teniendo un impacto negativo en la economía global, pero la duración y extensión del problema es aún incierta», de acuerdo con Centeno, que ha asegurado asegurado que se vigila «muy de cerca la situación» y «no se ahorrarán esfuerzos para contener la enfermedad».
Por el momento, el acuerdo entre los ministros ha sido coordinar las respuestas al brote, hasta ahora «diferenciadas» y recurrir «a todas las herramientas políticas apropiadas para conseguir un crecimiento fuerte y sostenible» y protegerse de eventuales riesgos.
Una de esas herramientas son las medidas fiscales «donde sean apropiadas, ya que pueden necesitarse para sostener el crecimiento». Centeno mencionó que el Pacto de Estabilidad y Crecimiento incluye una cláusula que permite una «desviación temporal» de la senda de ajuste, «preservando la sostenibilidad fiscal». El portugués, que quiso enfatizar la temporalidad de esta clase de medidas, instó a los participantes en la reunión a buscar «opciones» para tener un debate más estructurado en sus próximas citas a mediados de este mes. «Ello incluirá todas las posibilidades de políticas fiscales, financieras y estructurales», concluyó.