El Gobierno amplía a todo 2021 el IVA cero a la compra de material sanitario con unos 500 millones de coste

El Consejo de Ministros de este martes aprobará la ampliación hasta el 31 de diciembre de este año del IVA a tipo cero para la compra de materiales de protección sanitaria, como mascarillas, geles desinfectantes y el resto de productos que realizan administraciones públicas, centros hospitalarios o entidades sociales. 

Así lo ha anunciado este lunes la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, durante su intervención  en la clausura de la tercera jornada de formación ‘Crisis y Recuperación Económica’, organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), en colaboración con el Observatorio de la Realidad Financiera (ORFIN) y la Universidad de Alcalá. 

De esta forma, el Gobierno extiende a todo el ejercicio la exención del IVA a la compra de material sanitario, que concluía este 30 de abril, una semana después de que la Comisión Europea prorrogase hasta finales de ejercicio la exención en el pago del IVA a las importaciones de equipos de protección, como mascarillas o guantes y de otros productos sanitarios como respiradores procedentes de fuera de la UE. 

En cuanto al coste, Montero no ha apuntado posibles cifras, si bien la exención durante todo el ejercicio podría restar aproximarse 500 millones de euros a las arcas públicas,  según cálculos realizados por Economía Digital, ya que la medida comportó en sus siete meses de vigencia del año pasado un coste de 298 millones de euros, tal y como reflejan los datos de la Agencia Tributaria. 

La polémica del IVA de las mascarillas

Con el anuncio de la prórroga de la exención el Ejecutivo evita una polémica similar a la vivida el año pasado con motivo del IVA de las mascarillas, cuya bajada fue postergando bajo el argumento de que necesita contar con el visto bueno de la Comisión Europea, ya que la normativa comunitaria lo prohibía, mientras que desde la oposición exigían la bajada ante los numerosos países que la habían llevado a cabo desde mayo de 2020. 

Finalmente en noviembre aprobó la exención de la compra de material sanitario hasta el 30 de abril (que ahora se amplía al 31 de diciembre) y redujo al 4% el tipo aplicable a mascarillas quirúrgicas desechables, con vigencia en este caso hasta el 31 de diciembre de este año, lo que se unió a la bajada del precio máximo de venta de las mascarillas quirúrgicas desechables, que pasaron a no poder costar más de 0,72 euros, frente a los 0,96 euros que podían alcanzar hasta entonces. 

Recientemente la AIReF calculó en 353 millones de euros el impacto recaudatorio de bajar el IVA de las mascarillas quirúrgicas del tipo del 21% al superreducido del 4%, cinco veces que los 1.538 millones que calculaba Hacienda. 

A mediados de diciembre el Gobierno estableció mediante otro real decreto ley el tipo 0 para las vacunas y productos para diagnóstico in vitro de la Covid-19 con vigencia hasta el 31 de diciembre del año 2022. 

Mientras, en febrero la ministra María Jesús Montero rechazó la posibilidad de rebajar el IVA de las mascarillas FPP2 desde el 21% al 4% como pedían algunos grupos debido a que en España “no son obligatorias”. 

Impacto en déficit

De cualquier forma, Montero ha indicado que todas estas medidas impactaron en el déficit público de 2020, que cerró en el 10,09% del PIB sin el impacto de la reclasificación de la Sareb, o el 10,97% contemplándolo, por debajo en ambos casos de la previsión inicial del 11,3% y de lo estimado por los organismos. 

En términos de caja, ha destacado que se ha roto la relación entre caída del PIB y de los ingresos, ya que los ingresos tributarios cedieron un 8,8%, por debajo del retroceso del 9,9% del PIB nominal.  Lo mismo ha sucedido respecto a la repercusión en el empleo.

La ministra ha indicado que esta semana se remitirá el Programa de Estabilidad con la nueva senda de déficit hasta el año 2024, en el que se revisará la previsión de la tasa de referencia de un déficit del 7,7% del PIB para este año, tras haber reducido hace tres semanas el pronóstico de crecimiento del PIB del 9,8% al 6,5% por el impacto de la tercera ola en el primer trimestre, Filomena y el retraso del impacto positivo de los fondos europeos.