El bitcoin, ¿sustituto digital del oro?
Salvador Casquero, analista de innovación y tecnología financiera del IEB, defiende con entusiasmo el bitcoin y similares
A pesar de su elevada volatilidad actual, el bitcoin será el «sustituto digital» del oro, ya que permite operar en tiempo real sin necesidad de intermediarios y «con total seguridad», lo que hará ahorrar a los ciudadanos, según afirman los expertos.
El analista de innovación y tecnología financiera del Instituto de Estudios Bursátiles, Salvador Casquero, afirma en una entrevista con Efe que las monedas virtuales tienen un futuro «brillante» por la tecnología en la que se basan (llamada «cadena de bloques»).
Casquero argumenta que con esta tecnología «va a cambiar al mundo» y que con ella se «reconstruirá» el sector financiero y los clientes tendrán un ahorro «considerable». La característica principal la moneda encriptada es que está basada en un sistema digital descentralizado, que «complementa» las funciones de desintermediación de Internet.
Desde entonces se han lanzado muchas divisas digitales más, como la de la plataforma Ethereum, ether, que es la segunda más negociada en este mercado, y su uso se generaliza ya que posibilita realizar transacciones instantáneas «con transparencia» y «total seguridad» pues «el fraude es imposible», explica Casquero.
De hecho, ya hay instituciones que las aceptan, como la ciudad suiza de Zug, conocida como «Crypto Valley» o el Silicon Valley de las criptomonedas. En España, donde «todavía falta una regulación clara» al respecto, recuerda el experto, recientemente un consorcio multisectorial con cerca de 70 empresas ha presentado Alastria, la primera red nacional basada en «blockchain».
Esta tecnología de la cadena de bloques posibilita un registro distribuido de las transacciones digitales en tanto que transfiere y almacena datos de manera «segura, anónima y permanente, sin necesidad de intermediarios».
Además, destaca Casquero, va a «revolucionar» todos los segmentos económicos ya que también es útil para crear «tokens», valores o activos digitales transferibles que tienen bienes y servicios detrás (como es el caso de las criptodivisas).
La «tokenización» de la economía, es decir, la digitalización de activos, supondrá un ahorro a los ciudadanos y empresas mediante una «gestión más inteligente» del sistema, al reducir costes y aumentar la transparencia y fiabilidad del mismo, añade.
Casquero cita el ejemplo de una compañía emergente que recientemente ha «tokenizado» un diamante, tras lo cual su propiedad es transferible únicamente por internet, con la seguridad de que «al ser una tecnología de registro compartido, todo el mundo conoce de quién es su propiedad en caso de robo o extravío».
Lo mismo se hace ya en Ecuador, señala, con la propiedad de terrenos, que figura en una red de «blockchain». Asimismo, augura, se hará en el futuro con la «tokenización» de los documentos de identidad nacionales, al crearse un «DNI universal» que sea válido en todo el mundo, en un proceso que espera se extienda por todos los sectores económicos.