El BdE advierte que la crisis en morosidad empezará por el consumo
Cree que el sector puede aguantar una mora del 13% y señala que serán necesarios planes para reducir el endeudamiento que dejará la crisis a España
El Banco de España alerta del riesgo de que una parte del crédito que se ha acogido a una moratoria a raíz de la crisis del coronavirus derive en un impago. En su informe de estabilidad financiera, el organismo que gobierna Pablo Hernández de Cos apunta que donde primero se van a ver los impagos es en el crédito al consumo. Antes de la crisis del coronavirus, el supervisor ya insistía a la banca que fuera cuidadoso con la concesión de este tipo de crédito. El gobernador ha pedido planes que mitiguen posteriormente del fuerte endeudamiento que dejará la pandemia.
Habrá que afrontar su reducción «una vez que se disipen los efectos de la crisis, a través del diseño y la implementación de un programa de consolidación fiscal de medio plazo y de la aplicación de las reformas estructurales necesarias», ha señalado Hernández de Cos.
Respecto a la banca, el organismo apunta que los clientes más débiles de cada entidad son aquellos que tenga firmada tanto una hipoteca, como un préstamo al consumo y los primeros indicios vendrán por los segundos. «Como consecuencia del shock introducido por el coronavirus, los impagos en crédito al consumo se producirán en una fase más temprana que en el crédito hipotecario para los hogares que combinan distintos productos de préstamo», apunta la entidad en su presentación del informe.
En total, el banco calcula que está situación la sufren el 7,5% de los hogares españoles, que equivalen a menos del 20% del total de hogares con préstamos de las entidades de crédito.
El impacto en morosidad derivado de la deuda empresarial estará mitigado por el sistema de protección del ICO, que asegura hasta el 80% de la deuda de su programa de apoyo por 100.000 millones; si bien casi una cuarta parte de la cartera crediticia podría verse afectada. «La exposición de las entidades de depósito a sectores especialmente sensibles a la crisis del coronavirus se situaba en diciembre de 2019 en torno al 20 % del crédito a sociedades no financieras», señala el organismo.
La institución calcula que la banca cuenta con capital suficiente para asumir un incremento de la morosidad de 8,2 puntos. Es decir, que tendría margen para absorber un incremento hasta niveles que rondaría el 13%. En febrero, el sector marcó mínimos en morosidad, con una tasas del 4,79%.
Dos años para digerir el golpe de la pandemia
El Banco de España publicó hace unas semanas sus estimaciones para la economía española, en las que pronosticaba una contracción del PIB comprendida entre el 6,6 y el 13,6%, teniendo en cuenta distintos supuestos.
En su hoja de ruta, la entidad también espera una recuperación económica 2021 que, en todos los casos, llevaría al PIB a los niveles de 2019 un año después. Si bien, destaca que existen muchas incógnitas sobre la magnitud del repunte del próximo ejercicio.
«No puede descartarse que, desde un punto de vista sanitario, la pandemia se prolongue, con distinta intensidad, más allá de lo supuesto en las simulaciones. En segundo lugar, a pesar de las medidas de política económica implementadas para mitigar sus efectos adversos, podrían producirse daños persistentes de la crisis sanitaria sobre la estructura productiva de la economía», adelante.
El Banco de España anticipa que la parte más dura de la contracción económica la registrará España en el segundo trimestre de este año, después de la contracción por encima del 5% sufrida durante el primer trimestre, según los datos adelantados la semana pasada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).