El BCE pagará parte de la factura de la cumbre de Barcelona
El organismo dirigido por Mario Draghi cooperará con los costes del dispositivo de seguridad. Los policías venidos de fuera de Catalunya son alojados en cuarteles “para ahorrar”
El Banco Central Europeo –BCE– también pagará la cuenta de la seguridad de la cumbre de los banqueros europeos que se celebra a partir de hoy y hasta el próximo viernes en Barcelona. La institución presidida por Mario Draghi asumirá parte de los costes del amplio dispositivo de vigilancia que permanecerá activo en toda la ciudad.
El desplazamiento de unos 2.000 policías de varias ciudades españolas y el cordón policial desde el aeropuerto de El Prat hasta el Port Olímpic son algunos de los gastos que correrán a cuenta parcial del Banco Central Europeo, según han confirmado fuentes del Departament d’Interior a Economía Digital.
8.000 policías movilizados
Ni el departament d’Interior ni el ministerio del Interior han querido detallar el coste del operativo de seguridad, que irá a cargo del Gobierno español a través de la administración autonómica y central. Un total de 8.000 policías han sido desplazados para blindar Barcelona, en especial en el aeropuerto de El Prat, el Port Olímpic y el Fòrum, donde se celebrarán algunos actos de presentación de la cumbre.
La Generalitat aportará unos 4.500 agentes, mientras que la Policía Nacional tendrá alistados a otros 3.500 policías nacionales y guardias civiles (unos 400 de ellos son agentes rurales) que han sido desplazados para reforzar las fronteras y las principales vías de acceso a España.
Hoteles de la periferia
Buena parte de los policías movilizados han sido alojados en los cuarteles militares del Bruc y de Sant Andreu de la Barca, aunque también se han hecho reservas para algunos grupos en hoteles del área metropolitana, según ha podido saber este diario. El ministerio ha hecho esfuerzos para intentar alojar a la mayor cantidad de agentes posible en los cuarteles para adelgazar la factura en alojamiento.
El dispositivo de seguridad tendrá un doble mando: el encabezado por el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, y el liderado por el conseller de Interior, Felip Puig, aunque la máxima responsabilidad recaerá en el ministerio.