EEUU se lanza contra Deutsche Bank por la venta de hipotecas basura 

En una fecha simbólica, este jueves 15 de septiembre –aniversario de la caída de Lehman Brothers que dio el pistoletazo de salida a la crisis financiera global–, la prensa de Estados Unidos (EEUU) reveló la posible multa a Deutsche Bank por su papel en la comercialización de las hipotecas tóxicas (o hipotecas basura).

El Departamento de Justicia estadounidense pretende que la entidad alemana pague 14.000 millones de dólares (en torno a 12.400 millones de euros) por las irregularidades cometidas entre 2005 y 2007, en la antesala de estadillo de la burbuja. Así lo reconoció el propio Deutsche Bank, que advirtió sin embargo que «no tiene intención» de pagar una multa de tal magnitud. Se abre ahora un periodo de negociación.

Las autoridades de Washington, por su parte, optaron por no comentar las informaciones divulgadas. La estrategia es mantener un perfil bajo, y más en el marco de una campaña electoral marcada por la crispación.

Sanciones a Wall Street

Aunque finalmente no alcance los 14.000 millones, la sanción a Deutsche Bank podría convertirse en uno de las mayores correctivos del ejecutivo de EEUU contra los bancos que protagonizaron los excesos pre-crisis. Y, sin duda, la multa más grande a una entidad europea.

Hasta el momento, ha sido la banca de Wall Street la que ha pagado algunos de los platos rotos –las sanciones hasta ahora han sido económicos, sin implicaciones penales para los directivos de las compañías—de la burbuja inmobiliaria en EEUU. En 2014, el Bank of America acordó pagar 16.500 millones de dólares por sus negocios con las hipotecas basura, la mayor multa hasta la fecha.

JP Morgan, el mayor banco por activos del país, fue castigado con 13.000 millones, mientras que Goldman Sachs tuvo a bien pagar 5.100 millones por sus actuaciones en la primera década del siglo XXI.