Los economistas temen un aumento de déficit y deuda por los Presupuestos y el IPC
El Consejo General de Economistas avisa del posible aumento del déficit y la deuda por las medidas "expansivas" de los Presupuestos y la merma de la recaudación por la inflación y el menor crecimiento
El Consejo General de Economistas (CGE) ha lanzado este jueves una advertencia sobre el posible aumento del déficit público hasta el 9% del PIB y de la deuda pública hasta el 121,5% del PIB como consecuencia del aumento del gasto por las medidas de los Presupuestos «expansivos» de 2022 y los factores no previstos de un menor crecimiento y una alta inflación que mermarán la recaudación.
Así lo ha señalado el presidente del CGE, Valentín Pich, durante su intervención en la presentación del último Observatorio financiero de la institución, que ha rebajado al 5,8% el crecimiento de este año y lo mantiene en el 6% en 2022 tras la revisión realizada por el INE del segundo trimestre, lo que supone dos y tres décimas menos, respectivamente.
La advertencia realizada por los economistas coincide con la aprobación del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 este mismo jueves en un Consejo de Ministros extraordinarios después de que el PSOE y Unidas Podemos hayan alcanzado un acuerdo tras consensuar la nueva Ley Estatal de Vivienda que habilitará a las CCAA para limitar los precios del alquiler a grandes propietarios.
Presupuestos «expansivos» y alta inflación
En este sentido, Pich ha dicho que era «de esperar» que los PGE de 2022 fuesen de carácter «expansivo«, tal y como se corrobora con algunas de las medidas que se van a incluir en las cuentas públicas, como la subida del 2% del salario de los funcionarios, un aumento aún mayor para las pensiones o el bono de 250 euros al mes para el alquiler a menores de 35 años.
Sin embargo, ha explicado que los economistas no contaban con el elevado repunte de la inflación, que ya alcanza el 4% en septiembre, ni con un crecimiento menor del previsto en la economía tras la revisión a la baja realizada por el INE.
En este sentido, ha avisado de que es «posible» que acabe mermando la recaudación prevista para atender el aumento de gastos previsto y que, por consiguiente, aumente el déficit público y la deuda pública. «Todos nos ponemos a temblar con la inflación al recordar lo que sucedió en la economía en los años 80 pero esperamos que sea transitorio», ha apuntado el coordinador del observatorio, Salustiano Velo.
Según las previsiones del CGE, la deuda pública se mantendría en torno al 121,5% del PIB, por encima del 119,5% del PIB del objetivo del Gobierno, y el déficit público en una horquilla de entre el 8% y el 9%, lo que podría superar hasta en seis décimas la estimación del Ejecutivo.
La luz y la nueva Ley de Vivienda
El presidente de la Comisión Financiera del CGE, Antonio Pedraza, ha avisado de que la recuperación «se está aletargando» por la subida de los costes de las materias primas, algo que afecta «poderosamente» a España por ser el país europeo con mayor dependencia hacia estas materias.
Aunque espera una bajada de la inflación el próximo año, ha incidido en la repercusión del coste de la luz, y ha apuntado que pese a los cambios (bajada del IVA del 21% al 10% o recorte de beneficios de las eléctricas) la energía pasa a suponer ahora el 66% en la factura de la luz, frente al 38% antes.
Ha hecho hincapié también en el problema de la productividad y su constante caída pese a lo que suele suceder en periodos de crisis, y si a ello se suma el impacto de la inflación y el elevado precio de la electricidad cree que acabará afectando a la competitividad.
También se ha referido a la nueva Ley de Vivienda consensuada entre el PSOE y Unidas Podemos que habilitará a las CCAA para limitar el precio de los alquileres de los grandes propietarios (10 o más viviendas) y para congelar los precios de los alquileres de viviendas de particulares, así como incentivos para su bajada, junto a un recargo en el IBI del 150% que podrán fijar los ayuntamientos a viviendas vacías.
A su juicio, podría ser un «farol» o un «efecto escaparate» en función de las CCAA y ayuntamientos que decidan aplicar las medidas, que ha cuestionado en base a la experiencia de la regulación de la vivienda aprobada en Cataluña.
Dudas sobre los fondos europeos
En cualquier caso, Pich ha apuntado que los Presupuestos de 2022 consignarán una segunda anualidad de 25.000 millones de euros de los fondos europeos que que serán claves para fortalecer la economía y consolidar la recuperación si se destinan a la recuperación y a la transformación de la economía.
“Hemos de aprovechar este momento para introducir dinámicas de mejora en el modelo productivo porque, más tarde o más temprano, volverán las reglas fiscales y los ajustes con objeto de reducir el déficit por la UE», ha enfatizado.
En el acto ha participado el economista y eurodiputado, Luis Garicano, quien ha citado como las tres grandes carencias del Plan de Recuperación español las «falsas» reformas que «no abordan los cuellos de botella y se venden contrarreformas como reformas», así como unas inversiones que «no transformarán la economía» al priorizar bienes de consumo en vez de aumentar capacidades, y la «falta de consenso político, la improvisación y los globo sonda».
Garicano ha lamentado el «problema de la politización y de ejecución» con los fondos europeos de hasta 140.000 millones de euros que recibirá España hasta 2026, tras haber recibido el anticipo de 9.000 millones en agosto y haber solicitado otros 1.000 millones a recibir en la última etapa del año.