Los economistas piden «sacrificios» al alertar de un IPC del 7,1% y más déficit y deuda
El Consejo General de Economistas (CGE) mantiene su previsión de crecimiento en el 3,9% para este año y pide actualizar los Presupuestos a la coyuntura actual
Elevada incertidumbre y mayores desequilibrios fiscales de los previstos por el Gobierno. El Consejo General de Economistas (CGE) mantiene su previsión de crecimiento en el 3,9% para este año pero avisa de un «velo de incertidumbre» en la economía este verano y alerta de un IPC medio del 7,1% este año, por lo que ve imprescindible «sacrificios» compartidos entre empresas, familias y administraciones.
Estos son algunos de los principales mensajes del último Observatorio Financiero elaborado por los economistas, referido al primer cuatrimestre y presentado este jueves en rueda de prensa, en la que el presidente del CGE, Valentín Pich, ha augurado un «buen año» turístico y crecimiento económico del 3,9%, aunque por debajo del 4,3% previsto por el Ejecutivo.
Pich ha indicado que la economía española lleva «dos años y cinco meses entre algodones» ante el respaldo fiscal europeo y las ayudas del Estado aprobadas con motivo de la pandemia, si bien ahora avisa del fin de los tipos negativos y la necesidad de que el Estado atienda a capas de la población con «cantidades ingentes» para atender a población necesitada con motivo de la guerra.
Por ello, ha pedido reformas y trabajar para «no cometer errores y prepararse para tener la suficiente flexibilidad» que permita adaptarse a unas circunstancias que «no serán fáciles». En este sentido, ha pedido repartir los «sacrificios» a modo de un Pacto de Rentas o similar para que «todo el mundo arrime el hombro», tanto empresas, como familias y administraciones.
Así las cosas, los economistas consideran. en su ‘píldora’ sobre el Pcto de Rentas que sería «sensato» incluir a las pensiones en el Pacto de Rentas, así como a los alquileres, que las empresas no trasladen todo el incremento de sus costes a precios conteniendo por tanto sus márgenes y un plan que ligue los salarios a la productividad.
El presidente de la Comisión Financiero del CGE, Antonio Pedraza, ha puesto como ejemplo para el Pacto de Rentas el sector público para controlar la subida tanto del salario de los funcionario como de las pensiones, al ser «absolutamente clave» que el sector público dé ejemplo para evitar una espiral inflacionista que sería «muy dañina» para la economía.
Pich ha indicado que en una economía como la española la competitividad «no es excelente» y entrar en una deriva inflacionista sería «peligrosísimo», por lo que ha pedido «explicar y dar ejemplo» en lo referente a los necesarios «sacrificios».
Crecimiento del 3,9%, IPC medio del 7,1% y más déficit y deuda de lo previsto
Los economistas mantienen su previsión de crecimiento en el 3,9% para este año, pero aunque el crecimiento previsto para España para este año sea superior al de la media de países de la zona euro, Pich ha pedido no olvidar que aún queda por recuperar un 3,4% del PIB que perdido durante la pandemia.
Según Pich, previsiblemente «no sucederá hasta el año que viene», mientras que algunos países como Francia y Holanda ya lo han hecho, y otros como Alemania o Italia lo lograrán en 2022. En este sentido, ha advertido de la situación de incertidumbre por los acontecimientos geopolíticos, la guerra de Ucrania, los problemas de oferta en las cadenas de suministros o los brotes del Covid.
Tras un alza del PIB del 0,3% en el primer trimestre y un iPC del 8,3% en abril, los economistas estiman que la economía crecerá un 3,9% y calculan una inflación media en el conjunto del año del 7,1%, en el primer caso por debajo del 4,3% calculado por el Gobierno y en el segundo por encima de la inflación de alrededor del 6% prevista por el Ejecutivo.
Asimismo, estiman una tasa de paro del 13,2% y lanzan de nuevo la voz de alarma sobre los desequilibrios presupuestarios ante un déficit público estimado del 5,3%, tres décimas más de la previsión oficial, y una deuda pública del 116,5% del PIB, también por encima de lo calculado por el Ejecutivo.
«La situación es preocupante; el déficit estructural que tenemos del 4% hace necesario un control eficiente del gasto, que actualmente crece por encima del PIB», ha subrayado Pedraza, quien cree que ello contrasta con las medidas adoptadas esta semana en relación a la oferta de empleo público. Mientras, echa de menos incentivos al sector privado, sobre todo a las pymes.
Los economistas también ven necesario actualizar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) a la coyuntura actual ante la elevada inflación.