Las dos claves fundamentales si quieres pasar de una hipoteca variable a fija
El cambio a una hipoteca con un tipo de interés variable se puede llevar a cabo de distintas maneras
Mientras que las personas que tienen una hipoteca fija siempre pagan la misma cuota, aunque el interés pueda ser más elevado, en la hipoteca variable el préstamo está sujeto a las variaciones del Ãndice al que está referenciado, que suele ser, el eurÃbor a un año. Teniendo en cuenta que este Ãndice no ha hecho más que subir en los últimos meses, cada vez son más las personas que valoran cambiarse de una hipoteca variable a una fija.
Lejos de mejorar, la expectativa es que el indicador continúe creciendo hasta final de año. Según las estimaciones de la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin), el indicador alcanzará al final del año el 2,2%, lo que significa que las revisiones anuales para determinar el coste de las cuotas encarecerán los préstamos de las familias en 130 euros al mes, y en más de 1.500 euros al año.
De hecho, de seguir esta tendencia, la asociación cree «posible» que en 2023 se alcance un EurÃbor a 12 meses del 3%, lo que supondrÃa un encarecimiento de las hipotecas por encima de los 2.000 euros al año, tomando como referencia un préstamo tipo de 100.000 euros a 25 años.
Consulta a otros bancos
«Los bancos están teniendo avalanchas de peticiones que quieren cambiarse de variable a fijo», indica la presidenta de la Asufin, Patricia Suárez, en una entrevista en cadena SER. «Como cuando tienes muchos novios, se ponen duros», ejemplifica, por ello, aconseja a las personas que quieran cambiar de una hipoteca variable a una fija: «Ve a tu banco, pero ve a otros bancos, muestra que tienes otras opciones».
Un cliente con hipoteca y todas las facturas vinculadas es un cliente que no quieres perder
Y es que, según Suárez, cuando las entidades financieras «ven que quieres cambiar la cosa cambia». AsÃ, zanja: «Un cliente con hipoteca y todas las facturas vinculadas es un cliente que no quieres perder».
Elegir bien como cambiar la hipoteca
«Si lo haces con tu banco te deberÃa costar poco, no llega ni a 500 euros», concreta Suárez respecto al coste de cambiar de una hipoteca variable a una fija. No obstante, señala: «Si te vas con otro banco es donde empieza la fiesta». Y es que, para llevar a cabo este proceso se puede formalizar de distintas maneras.
Mientras que la novación de la hipoteca consiste acordar una modificación de las condiciones con la entidad financiera a la que se debe devolver el préstamo, la subrogación se basa en la renegociación de una hipoteca con un banco distinto al que se debe devolver el préstamo hipotecario. «Si lo haces con una subrogación, te deberÃa salir a lo mismo porque el banco asume varios gastos pero los bancos no quieren hacer subrogaciones porque hacen todo el estudio, toda la oferta y al final tu banco te retiene», destaca.