Deutsche Bank suspende la venta de su negocio en España
Deutsche Bank decide dar continuidad a su negocio en España después de que ninguna oferta se acercara a sus condiciones
Marcha atrás de Deutsche Bank. Tras meses negociando la venta de su negocio minorista en España, el mayor banco alemán ha decidido terminar con el proceso y dar carpetazo a la operación para seguir operando en el país, según ha podido saber Economía Digital. Las ofertas a la baja han convencido a los directivos del banco en Alemania, que tenían sobre la mesa un plan de continuidad elaborado por su dirección en España y que finalmente aplicará.
La decisión se tomó en los últimos días, después de constatar que ninguna oferta se acercaba a los 700 millones que quería el banco. De hecho, la semana pasada debía responder a Abanca y BBVA, cuyas ofertas seguían vivas, pero no lo hizo, lo que generó malestar en estas dos entidades. Sus ofertas rondaban los 500 millones, por lo que no fueron consideradas por Deutsche Bank.
Las ofertas por Deutsche Bank no llegaban a los 700 millones que quería el banco alemán
El banco alemán vivía una pugna entre las intenciones del grupo, de salir de España, y las de su directiva en el país, que apostaba por la continuidad. La cúpula española del banco sostenía que podía ser el banco extranjero de referencia en el mercado español, y temía que la venta a un gran banco, como BBVA, terminara con la salida de prácticamente toda la plantilla. Como explicó este medio, los grandes bancos solo estaban interesados en los clientes, pero no necesitan más oficinas ni personal.
Por ello, la dirección de Deutsche Bank España presentó en Frankfurt un plan de continuidad, llamado Plan España, en el que apostaba por seguir en el país con la intención de convertirse en el banco extranjero de referencia, ocupando el vacío dejado por Barclays, que vendió su negocio español a Caixabank. Jugaba a su favor el hecho de que, tras completar con éxito una ampliación de capital de 8.000 millones, las urgencias del grupo por vender negocios como el español desaparecieron.
Las ofertas frustradas por Deutsche Bank
Deutsche Bank cuenta en España con 700.000 clientes, 230 oficinas, 2.600 empleados y unos activos de 16.000 millones de euros. Su venta se inició a principios de verano, y mientras los grandes bancos apenas mostraron interés, entidades como Crédit Mutuel y Abanca sí que estudiaron seriamente la compra y presentaron oferta. A ellos se sumó BBVA.
Entre la gran banca –con excepción de BBVA– se impuso la tesis de que la compra no era rentable: implicaba un alto coste de reestructuración solo para incrementar la cartera de clientes, unos clientes sobre cuya continuidad había dudas, puesto que son clientes que suelen diversificar y buscan tener parte del dinero en un banco extranjero. Para entidades más pequeñas, en cambio, suponía una oportunidad para incrementar red.
Crédit Mutuel, tras romper con el Popular, se interesó por Deutsche Bank para extender su negocio en España, donde tiene Targobank. El banco gallego Abanca, controlado por el empresario venezolano Juan Carlos Escotet, tras superar la crisis, se ha puesto en modo compra, y el banco alemán suponía una oportunidad de expansión en Madrid y Barcelona. Por ello presentó oferta y, tras descartarse Crédit Mutuel, era el principal postor, junto con BBVA. Finalmente, ninguno de ellos se llevará el gato al agua.