La deuda de empresas y hogares sube un 3,1% en el último año y roza el 150% del PIB
La crisis de la Covid-19 ha elevado la deuda de las empresas en 56.800 millones y ha reducido en 6.400 millones la de los hogares, que han aumentado su riqueza financiera un 8,6% en el último año
Los estragos de la abrupta crisis de la Covid-19 se siguen haciendo notar en las cifras de la economía española y muestra de ello es el repunte de la deuda consolidada de las empresas y de los hogares e instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares, que alcanzó los 1,66 billones de euros en el primer trimestre del año, el 149,3% del PIB, un 3,1% por encima de los 1,61 billones de euros del año anterior (130,3% del PIB).
Así se desprende de las Cuentas Financieras de la economía española, elaboradas y publicadas este lunes por el Banco de España, que reflejan que el repunte de la ratio de endeudamiento sobre pIB se debió al aumento de la deuda (numerador de la ratio) y, en mayor medida, al descenso del PIB (denominador de la ratio).
En todo caso, el alza de la deuda agregada de empresas y hogares es fruto de un comportamiento dispar de estos dos sectores, ya que la deuda de las sociedades no financieras aumentó, mientras que la de los hogares e ISFLSH disminuyó en el último año a pesar de la crisis económica derivada por el estallido de la pandemia de la Covid-19.
En detalle, la deuda consolidada de las empresas aumentó de los 906.000 millones de euros de 2019 a los 963.000 millones de euros en el primer trimestre de este año, alcanzando el 86,6% del PIB. Si además se añaden los intereses el porcentaje sería un 109,7%. Entre tanto, la deuda de hogares e ISFLSH disminuyó de 705.000 millones de euros a los 698.000 millones de euros en el primer trimestre de este año, el equivalente al 62,8% del PIB.
De esta forma, en un año se ha elevado la deuda empresarial en 56.800 millones de euros, lo que evidencia el impacto de la crisis en el sector empresarial, superior a las familias, que ha descendido en 6.400 millones de euros, al menos en términos de deuda, algo que podría explicarse por las medidas de sostenimiento de rentas aprobadas por el Gobierno, como los ERTE o las distintas prestaciones.
La riqueza de los hogares aumenta un 8,6%
A pesar del aumento de la deuda de las empresas, las familias e ISFLSH lograron, además de reducir su deuda, incrementar la riqueza financiera, que se mide por la diferencia entre los ahorros que atesoran y las deudas que acumulan, al aumentar un 8,6%, hasta los 1,63 billones de euros al final del primer trimestre.
En relación con el PIB, los activos financieros netos representaron el 147%, ratio que fue 25,2 puntos porcentuales superior a la de un año antes debido tanto al aumento de los activos financieros netos como al retroceso del PIB.
La riqueza de los hogares se mantiene todavía en niveles muy por encima de los niveles previos a la crisis económica de 2008, ya que en el primer semestre de 2007, justo antes del comienzo de la recesión, rozaba el billón de euros.
Los activos financieros de los hogares e ISFLSH alcanzaron a finales del primer trimestre de 2021 un
importe total de 2,3 billones de euros, un 5,4% superior al de un año antes, un alza que refleja la adquisición neta de activos financieros, que fue de 82.900 millones de euros en el último año, a la que se sumó una revalorización de los mismos de 39.100 millones de euros. La revalorización se concentró especialmente en el primer trimestre de 2021.
En relación con el PIB, los activos financieros de los hogares e ISFLSH representaron un 214,7% a finales del primer trimestre de 2021, 31,4 puntos porcentuales más que un año antes, debido al aumento de los activos y al retroceso experimentado por el PIB.
En relación con el PIB, los activos financieros totales de los hogares e ISFLSH representaron un 209,2% a finales del cuarto trimestre de 2020, 17,4 puntos porcentuales más que un año antes, debido al fuerte retroceso experimentado por el PIB.
Mayor peso de activos en efectivo y depósitos
Por componentes, el grueso de los activos financieros de los hogares se encontraba en el primer trimestre del año pasado en efectivo y depósitos (42% del total), seguido de participaciones en el capital (24%), seguros y fondos de pensiones (16%) y participaciones en fondos de inversión (15%).
El componente de participaciones en fondos de inversión fue el que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares (en 1,9 puntos porcentuales) con respecto a un año antes, mientras que el peso de las participaciones en el capital fue el que más cayó (-2,9 puntos porcentuales), como resultado del componente de transacciones, que fue negativo.
Los hogares cancelaron financiación por 4.000 millones
Entre enero y marzo, las operaciones netas acumuladas en los últimos cuatro trimestres, correspondientes a la financiación consolidada recibida por las empresas y los hogares e ISFLSH, fue de 49.600 millones de euros, lo que representó un 4,5 % del PIB. En términos netos, las sociedades no financieras captaron financiación nueva equivalente al 4,7 % del PIB, mientras que los hogares e ISFLSH cancelaron financiación por un importe que supuso un 0,3 % del PIB.
Asimismo, las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y administraciones públicas) mostraron en el primer trimestre un signo positivo (financiación neta otorgada) de 10.700 millones de euros, equivalente al 1% del PIB, frente al 2,6% observado un año antes.
El saldo fue positivo en el caso de los hogares (8,1% del PIB), de las empresas (1,5% del PIB) y de las instituciones financieras (3,2% del PIB, siendo el del Banco de España un 0,2% del PIB, el de otras instituciones financieras monetarias un 2% del PIB y el de las instituciones financieras no monetarias un 0,9% del PIB).
En sentido contrario, las administraciones públicas recibieron financiación en términos netos equivalente a un 11,7% del PIB, con una evolución del saldo hacia un valor cada vez más negativo.