Las constructoras echan en cara a Escrivá la dificultad para contratar personal cualificado
La construcciĂłn tiene un grave problema con la mano de obra, y pide alternativas de contrataciĂłn
La construcciĂłn se enfrenta a la combinaciĂłn perfecta entre inflaciĂłn, incertidumbre econĂłmica y falta de mano de obra. En cuanto a los dos primeros problemas, poco pueden hacer; y con respecto al ámbito laboral, las constructoras creen que el Gobierno deberĂa facilitar la entrada trabajadores extranjeros, sobre todo cuando se da en la ecuaciĂłn la cualificaciĂłn en origen y la necesidad de las empresas.
AsĂ lo han expresado algunas de las principales constructoras españolas en el ‘XIII Encuentro del Sector de Infraestructuras, el Transporte y la Movilidad Sostenible’ que han organizado Deloitte y ABC. El que ha tenido un tono más rotundo en una de las mesas redondas ha sido el CEO de OHLA, JosĂ© Antonio Fernández Gallar, que yendo a la raĂz ha explicado que «tenemos un grave problema de inflaciĂłn que impacta de manera directa con los recursos humanos».
El directivo de la constructora ha detallado que «antes tenĂa prestigio social trabajar en la construcciĂłn, y ahora gusta más trabajar en temas tecnolĂłgicos o entornos relacionados con la informática. Y eso hay que revertirlo».
El argumento para poner solución a esto lo antes posible, según esgrime Fernández Gallar, es que «la construcción tiene unas necesidades de infraestructuras brutales; y es evidente que se necesita mano de obra cualificada». Aquà es donde se agolpan los problemas con respecto a la mano de obra.
«En España terminarán trabajando las personas mayores. Hay que traer mano de obra de otros paĂses, pero hay que traerla formada». En este sentido, y por lo que respecta a España tambiĂ©n ha recordado que en nuestro paĂs existe un grave problema con la formaciĂłn profesional.
Pero el gran asunto de debate que disponĂa el CEO de OHLA es: Âżpor quĂ© no llega a España con más facilidad mano de obra cualificada para trabajar en la construcciĂłn? «Hay mano de obra fuera de España muy cualificada y con ganas de venir. Pero hay que solucionar las distancias entre esa mano de obra y cĂłmo traer a esos trabajadores de LatinoamĂ©rica u otras regiones que quieren trabajar aquĂ».
ÂżUn problema polĂtico?
Aquà el mensaje va para el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. Fernández Gallar recuerda que «entre las cuestiones a resolver: permisos de trabajo, marco regulatorio, que vengan con contratos en origen, que haya convenios con universidades o centros de formación«. Y eso es un déficit que debe abordar el Gobierno.
Desde las constructoras no ven lógico que habiendo una necesidad de mano de obra existan tantas dificultades para la contratación de personas de fuera de España. Y sobre todo cuando además existe una alta cualificación para los puestos demandados.
El Gobierno da vueltas
Ante esa situaciĂłn, el Gobierno viene desde hace meses estudiando diversas alternativas sobre polĂticas migratorias en materia laboral que, en parte, colmarĂa parte de las demandas de las constructoras. Pero se ha montado cierto revuelo sobre la medida.
UGT y CCOO han lamentado que el Gobierno rompa el consenso existente hasta ahora respecto a la polĂtica de migraciĂłn laboral, tras el anuncio de reforma del reglamento de la Ley de ExtranjerĂa, una propuesta «clasista» que «responde a los intereses de ciertos sectores econĂłmicos» y no de los trabajadores.
AsĂ lo indicaron hace unos dĂas ambos sindicatos en un comunicado, despuĂ©s de que El PaĂs adelantase una posible reforma de la Ley de ExtranjerĂa que facilitarĂa la incorporaciĂłn de miles de trabajadores extranjeros al mercado laboral y la regularizaciĂłn de inmigrantes. Sobre este asunto, el ministro Escrivá no ha querido pronunciarse y solo ha admitido que «hay margen de mejora y de perfecciĂłn en el procedimiento».
UGT y CCOO reconocen que el Reglamento de la Ley de ExtranjerĂa y algunos de sus elementos necesitan una reforma y asĂ lo han reclamado, pero insisten en que no podĂan esperar la forma en la que ha actuado el Gobierno.
El resultado será que haya «trabajadores migrantes de primera clase y trabajadores migrantes de segunda»
A su juicio, en los Ăşltimos meses el Ejecutivo ha roto el equilibrio y el consenso en torno a la polĂtica de migraciĂłn laboral, pero tambiĂ©n ha acentuado «la segmentaciĂłn» para convertirla «en un traje a medida» de ciertos «intereses econĂłmicos» y de las necesidades de algunos sectores, pero no de los trabajadores migrantes.
El anuncio de la reforma trata de evitar, segĂşn dicen, la participaciĂłn de las organizaciones sindicales más representativas de este paĂs e incluso que puedan dar su opiniĂłn. Ambos sindicatos coinciden en destacar que si las competencias en torno a este ámbito quedan repartidas en distintos ministerios, el resultado será que haya «trabajadores migrantes de primera clase y trabajadores migrantes de segunda».
Por otra parte, lamentan que «se llegue a la conclusiĂłn de que hay puestos de trabajo que no se cubren porque deben mejorar sus precarias condiciones», pero que «se asuma que estas condiciones sĂ son aceptables» para personas que proceden de otros paĂses.
Por ello, acusan al ministerio de actuar «de una forma clasista» teniendo en cuenta «que transmiten a la sociedad española la idea de que hay unos migrantes más aceptables que otros» y que «solo son aceptables si se puede extraer un beneficio económico».