Cómo afecta la subida de tipos a las personas que no tienen hipoteca
Para quienes sean deudores, inversores en ciertos valores o consumidores, la subida de tipos les afecta negativamente
En los últimos meses, el Banco Central Europeo ha subido los tipos de interés en tres ocasiones hasta los 200 puntos básicos con el objetivo de controlar la inflación. Esta política monetaria más restrictiva ha encarecido las hipotecas por consiguiente aumento del Euribor, el principal índice al que se referencian las hipotecas variables, pero también afecta a otros ciudadanos que no tengan hipoteca.
Según la compañía de microcréditos Vivus, la subida de los tipos de interés tiene consecuencias positivas para los ahorradores. Esto se debe a que cuando los tipos suben, los clientes que tienen dinero en depósitos de ahorro ganan más intereses. Esto puede incentivar el ahorro y reducir la demanda de dinero de la economía.
Deudores, consumidores y ciertos inversores salen perjudicados
Sin embargo, quienes tengan inversiones en valores de renta variable pueden verse perjudicados. Esto se debe a que la subida de tipos puede provocar un crecimiento menor de la economía durante los próximos meses, por lo que tiene repercusiones sobre la bolsa y la inversión se traslada a instrumentos de renta fija, como depósitos a plazo fijo o bonos gubernamentales.
Además, según datos del Banco de España correspondientes a agosto de 2022, el tipo de interés de los depósitos a plazo fijo aumentó al 0,63% de media, frente al 0,50% del año anterior, lo que supone obtener mayor rentabilidad si se apuesta por este tipo de productos financieros en el contexto económico actual.
En el caso de los deudores, la subida de tipos les perjudica notablemente, porque aumenta el coste de la deuda y se reduce la demanda de préstamos de todo tipo, tanto personales, como al consumo o los hipotecarios. Lo que reduce, a su vez, la demanda de ciertos bienes, como vivienda, vehículos y todos aquellos que se suelen financiar con deuda.
Más allá de que se aplacen compras grandes, los consumidores pueden verse perjudicados en los tipos de interés de productos bancarios que tengan contratados o incluso de tarjetas de crédito que suban sus cuotas. También es probable que las entidades bancarias eleven las comisiones por descubierto bancario.