La CEOE rechazará cualquier subida del SMI
La patronal defiende que no se trata de una negociación y que la situación económica no permite un nuevo incremento
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi. EFE
Los empresarios no estarán en la foto del Ministerio de Trabajo y de los sindicatos por la subida del salario mínimo interprofesional (SMI). Fuentes de la organización empresarial confirman que por muy moderada que sea la cifra que plantee el departamento que dirige Yolanda Díaz, ésta no contará con el apoyo de la CEOE.
Además de considerar que «no es el momento» y que la situación económica no permite esta subida, desde la patronal subrayan que la subida del SMI «no es una negociación ni una propuesta», sino que simplemente es una «consulta» que Trabajo traslada a los agentes sociales.
Fuentes empresariales subrayan la «prudencia» que defiende la CEOE ante esta decisión que el Gobierno ya ha tomado. Trabajo ha dejado en manos de la comisión experta del SMI la definición de la horquilla en la que se debería producir la subida, pero varios miembros del Ejecutivo han manifestado el compromiso de todo el Gobierno de que el SMI alcance el 60% del salario medio en 2023.
Las mismas voces explican que establecer un «suelo» para los salarios provoca un efecto contagio en el resto de las tablas salariales. Esta consecuencia, según la CEOE, puede tener una incidencia en los efectos de segunda ronda de la inflación, si la escalada de precios se traslada a las remuneraciones.
Sobre el efecto en el resto de los salarios también se pronunció la semana pasada el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quién señaló que las subidas del SMI van forzando cada vez a más sectores a subir sus salarios si los convenios de éstos se sitúan por debajo de la cifra establecida.
Será en diciembre cuando la titular de Trabajo reúna a los agentes sociales para poner encima de la mesa las propuestas de la comisión experta y plantee una subida determinada del SMI, actualmente en los 1.000 euros mensuales. Desde UGT apuntan que defenderán una subida hasta los 1.100 euros y desde el Ministerio de Trabajo evitan dar una cifra hasta que los expertos entreguen su análisis.
Si la CEOE rechaza la decisión que está únicamente en manos del Gobierno, será la segunda subida en la que no participan los empresarios, junto a la de este año, aprobada en febrero de 2022 y aplicada con retroactividad para todo el ejercicio.
Elecciones en CEOE
La titular de Trabajo le ha pedido al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, «compromiso con su país», pero la patronal defiende que «los anuncios sobre subidas desmedidas del SMI» acaban convirtiéndose en «una injerencia en la negociación colectiva» por su impacto en las tablas salariales.
Además, Garamendi tiene su propia hoja de ruta, con unas elecciones en la organización empresarial y las críticas de sus socios por aceptar los pactos que ha ido proponiendo el Ejecutivo. Con esta situación, el presidente de los empresarios tendrá que defender su postura.
Aunque todavía no hay fecha para los comicios, el actual presidente podría comunicar su intención de renovar su mandato el próximo 21 de septiembre en la reunión de la junta directiva, como avanzó El Confidencial.
Dispuestos a negociar un pacto de rentas
La negativa a subir el salario mínimo interprofesional no apaga la voluntad de negociación de la patronal para alcanzar un pacto de rentas. «Claro que estamos dispuestos a sentarnos», respondió Garamendi esta semana en un acto organizado por La Vanguardia.
Sin embargo, el representante de los empresarios ya advirtió a los sindicatos que se puede hablar de cifras, pero no de «indexar los salarios a la inflación» porque esto «generaría una inflación estructural».
Las palabras de Garamendi llegaron en respuesta a las declaraciones de Pepe Álvarez, que urgió a la patronal a «poner día y hora» para tener una reunión acerca de la negociación colectiva. Álvarez acusó a la CEOE de haber paralizado la negociación y amenazó con más conflictos si no se pacta una subida salarial.
En cualquier caso, tal como publicó este periódico, la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, presionará a sindicatos y patronal para que vuelvan a retomar las conversaciones sobre el pacto de rentas. Calviño convocará en las próximas semanas la mesa del diálogo social para el Plan de Recuperación.
