CEOE se rebela contra la «inaceptable e ideológica» reforma laboral de Yolanda Díaz
CEOE rechaza la reforma laboral de Yolanda Díaz y avisa que aboca al "desencuentro" al ir en contra de las necesidades de las empresas y de las recomendaciones de Bruselas, poniendo en riesgo los fondos europeos
Duro comunicado de las patronales CEOE y Cepyme contra la «inaceptable, regresiva e ideológica» propuesta del Ministerio de Trabajo sobre la reforma laboral, tras la última reunión celebrada este jueves por la mesa de diálogo social en la que se aborda la modernización del mercado laboral.
El secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, ha trasladado de nuevo en la reunión el documento para la ‘contrarreforma laboral’ al que se oponen de forma tajante en la patronal y que rechazan de forma unánime «todas las organizaciones empresariales consultadas en los órganos internos de la confederación».
Desde la patronal advierten de que los planteamientos del Ministerio de Trabajo «van en contra de la adaptabilidad que necesitan las empresas para poder generar empleo en la actual coyuntura de incertidumbre y transformación», y también de las directrices que marca la Comisión Europea en esta materia, con lo que «se está poniendo en juego en último extremo la recepción ágil de los fondos europeos que el país necesita para la reconstrucción tras la pandemia».
Exige otro borrador para seguir negociando
Por ello, durante la reunión de la mesa tripartita de diálogo social de este martes, las organizaciones empresariales han trasladado la necesidad, para poder seguir negociando, de contar con un planteamiento nuevo por parte del Gobierno «alineado con las necesidades de las empresas y de las personas trabajadoras y de acuerdo con las recomendaciones de país de Bruselas».
A su juicio, en estos momentos «el texto parece responder a una motivación ideológica sin fundamentos económicos, no tiene en cuenta la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, y, por ello, aboca inevitablemente al desencuentro«.
Además, a la vista del último documento trasladado por el Ministerio de Trabajo a la mesa de diálogo social, CEOE apunta que si lo que se pretende es modernizar el mercado laboral, «no parece que la mejor opción sea plantear una propuesta que en todos sus elementos es regresiva e intervencionista, restando capacidad a la negociación colectiva«.
En el comunicado, CEOE y Cepyme señalan que quieren dejar claro que apuestan por unas «relaciones laborales de calidad», que permitan un desarrollo fructífero en el seno de la empresa en beneficio de todos. «Ese es el marco en el que habría que trabajar, en lugar de partir de la desconfianza y la sospecha hacia la empresa, arrojando a la opinión pública dogmas confusos como la asimilación de temporalidad y precariedad», han añadido al respecto.
Reducir la temporalidad «perjudica la empleabilidad de muchas personas»
En esta línea, y frente a las propuestas de Trabajo, las patronales subrayan que la temporalidad es un elemento intrínseco a muchas actividades de carácter estacional, con lo que «reducirla a un fenómeno residual perjudica la empleabilidad de muchas personas», en especial de las que carecen de cualificación y los jóvenes, en un momento en el que su tasa de paro ronda el 40%, e incluso supera el 50% en muchos territorios.
Las organizaciones empresariales comparten la necesidad de actuar contra la temporalidad irregular y no causal, por lo que, en el marco de la mesa de diálogo social, apoyan que a las herramientas ya existentes deberían sumarse otras que pongan límite a dicha situación, previa elaboración de un diagnóstico compartido.
En este sentido, subrayan que «urge un texto promovido por el Gobierno, más adecuado al requerimiento de Europa y a la realidad del tejido empresarial y de las personas trabajadoras, que no entorpezca la recuperación económica».
«Si el Gobierno persevera será sin nuestro apoyo»
Dado que CEOE y Cepyme rechazan la reforma laboral que se pretende «ajena a las solicitudes europeas y resultado de un pacto de Gobierno que no les obliga y que, además, es lesivo para el empleo», avisan de que si el Gobierno persevera en esta dirección, será «sin el apoyo de las organizaciones empresariales».
A su juicio, las propuestas del Gobierno restan capacidad de adaptación de las empresas en la entrada al mercado laboral; la permanencia, con «soluciones intervencionistas insólitas en el siglo XXI» por ajenas a la participación activa de los trabajadores y el uso excesivo del reglamento en vez de la negociación colectiva, lo que «inevitablemente recuerda las antiguas ordenanzas laborales, un despliegue más propio de contextos afortunadamente ya superados en toda Europa».
Igualmente, critican que «se alteran las reglas de salida, en un ejercicio de cinismo, que debilita la capacidad de adaptación del sector privado frente a las soluciones otorgadas al sector público».
«Solo si España recupera, o incluso supera, los niveles de actividad previos a la crisis, afrontando al mismo tiempo la modernización del modelo productivo y la recualificación de las personas trabajadoras de la mano de los fondos europeos, podemos lograr el objetivo compartido de creación sostenida de empleo, de calidad y con las mejores condiciones», concluyen.