Esta es la cantidad que van a subir las pensiones públicas en 2023
En el plan de recuperación, transformación y resiliencia el Gobierno incluyó dentro de las reformas la subida gradual de la cotización máxima de forma en un plazo de treinta años
Un grupo de jubilados en la playa de la Concha de San Sebastián. Foto: Efe/Juan Herrero
Dentro de la reforma de pensiones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, el Gobierno adquiere el compromiso de aumentar el importe de la pensión máxima de jubilación, y también, del destope de las bases máximas de cotización para cierto tipo de trabajadores. Se trata de un incremento que se llevará a cabo de forma gradual a lo largo de los próximos 30 años.
Dado que el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha establecido este año como el plazo máximo para impulsar esta medida, se calcula que el incremento en las bases máximas de cotización comiencen a aplicarse a partir del 2023 y se mantengan en vigor hasta 2053.
Subida de las pensiones públicas
El destope de las cotizaciones que va a proponer el Gobierno va a estar dirigido especialmente a las bases máximas. Por tanto, principalmente se verán afectados aquellos empleados o autónomos que perciban una retribución anual superior a los 49.000 euros, según ha indicado el diario ABC.
Si bien aún no existe una confirmación oficial, fuentes del Ejecutivo citadas por el medio apuntan a la posibilidad de incluir un nuevo tramo de cotización, que podría situarse alcanzar los 60.000 euros en 2053, una vez hayan pasado las tres décadas que abarca el proceso de destope.
De producirse este escenario, tendría lugar un crecimiento del 20,7% en esos 30 años en comparación con la base máxima de este año y que se sitúa en los 49.672 euros anuales. De ahí se deduce que se puedan llegar a cobrar hasta 3.402,8 euros en 2053.
Destope cotizaciones sociales
A través del destope de las cotizaciones sociales, que aún está pendiente de negociar, el Gobierno se propone generar ingresos adicionales entre 2030 y 2050, que es cuando se afrontará un mayor gasto en pensiones. Según apuntó Escrivà, si se hace «de forma cuidadosa» el aumento de la cotización máxima permitirá «rellenar» los ingresos de la Seguridad Social en las dos décadas en las que se concentrará la jubilación de la generación del «baby boom».
Este aumento de la cotización irá acompasado de una subida de la pensión máxima para mantener la contributividad del sistema, si bien este gasto no se tendrá que afrontar hasta que pasen los años de mayor tensión del gasto, por lo que «al final esto es neutro para el sistema», indicó el ministro.
