La Cambra prevé un crecimiento del PIB catalán del 2% en 2024 y se mantiene alerta de la inflación y la subida de tipos
La organización presidida por Mónica Roca avisa que las nuevas operaciones de crédito ya están bajando, lo que se traslada en menos actividad económica
La Cambra de Barcelona sigue siendo optimista y mantiene su previsión de crecimiento del PIB catalán en un 1,8% para este 2023, mientras que estima un aumento de la economía catalana del 2% en el 2024. Sin embargo, la organización empresarial alerta que, si no se frena la inflación ni la escalada de los tipos de interés de cara al segundo semestre del año, estas cifras podrían revisarse a la baja, aunque en ningún escenario calculan que Cataluña pueda entrar en recesión.
Según ha explicado Joan Ramón Rovira, jefe del gabinete de estudios de la cámara, durante la presentación de su informe de coyuntura, la economía catalana acelerará su crecimiento trimestral en el primer semestre del año, gracias a una avance del consumo privado, impulsado por la recuperación del turismo, y del sector exterior, en el que la comunidad autónoma empieza a ganar peso. Concretamente, crecería en un 0,3% y en un 0,6% en el primer y el segundo trimestre respectivamente.
Sin embargo, de cara a la segunda mitad del año, el centro de estudios de la Cambra considera que el ritmo de crecimiento se moderará fruto de una contribución más contenida del consumo privado y del turismo extranjero. Será entonces cuando, según la entidad, la subida de los tipos de interés se traduzca de forma generalizada sobre la actividad económica, debilitando el consumo de los hogares y moderando la creación de empleo.
De hecho, según datos del Banco de España analizados por la organización presidida por Mónica Roca, la nueva política monetaria impulsada para luchar contra la inflación ha desplumado las nuevas operaciones de crédito a principios de 2023. Hasta febrero, habían bajado un 9,2% en comparación con la misma cifra del año pasado. «Las nuevas operaciones de crédito están bajando, lo que quiere decir menos actividad empresarial», ha alertado la propia Roca.
La Cambra cree que el IPC crecerá un 4,1% en 2023
La previsión es que los tipos de interés sigan creciendo, si la inflación no frena. La Cambra asegura que los costes de producción ya empiezan a remitir, pero nuevas amenazas como la sequía podrían romper la tendencia a la baja del precio de los alimentos. La organización estima que el IPC catalán cerrará 2023 en un 4,1% interanual y 2024 en un 3,3%, aunque estas cifras quedan sujetas precisamente a la evolución de la escasez de agua.
No obstante, la Cambra mantiene sus previsiones de crecimiento por la evolución positiva del resto de factores macroeconómicos. Al crecimiento de ventas del consumo privado de los últimos meses, se suman unas buenas cifras de paro y unos datos récord de exportaciones catalanas, que aumentaron en un 18% en 2022, con la previsión de continuar esta dinámica positiva a lo largo de 2023.
Además, datos de la entidad barcelonesa aseguran que el empresariado catalán cree que los precios de venta seguirán creciendo ha bajado en el primer trimestre de 2023, lo que podría ser una señal de moderación de la inflación subyacente, que ha seguido subiendo mientras el IPC general se ha relajado. También refleja unas cifras más positivas a corto plazo el índice de gestor de compras (PMI), que lleva desestimando una recesión en España desde enero y ya se sitúa en los 58 puntos, por encima de la media de la zona euro.