Cámara de España pide más atención al turismo y las pymes en el Plan de Recuperación
Bonet, entrevistado por Economía Digital e 'Inversión', ve una "temeridad" implementar una reforma fiscal ahora y ve "fuera de lugar" una nueva subida del Salario Minimo
El Gobierno ha empezado a desgranar las líneas principales de las reformas e inversiones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia por el que España recibirá hasta 140.000 millones de euros hasta 2026 para sobreponerse de los estragos de la crisis de la Covid-19 e iniciar una transformación ecológica y digital.
En medio de las dudas sobre la ejecución de los recursos —España ha presupuestado 27.000 millones de estos fondos en las cuentas de este año–, el sector empresarial analiza el proyecto del Plan de Recuperación, a expensas del documento definitivo que se enviará a Bruselas en breve.
En una entrevista concedida a Economía Digital y la revista Inversión, José Luis Bonet, el presidente de la Cámara de Comercio de España, uno de los organismos que trabajará más de cerca a través de su red de 85 cámaras territoriales con las empresas en la canalización de los recursos y la implementación de los proyectos, cree que el enfoque europeo y el planeamiento del Gobierno español es “correcto”.
Sin embargo, Bonet considera que el “problema” reside en la ejecución del plan, ya que aunque valora la configuración del instrumento que impulsará los proyectos tractores, los denominados PERTE (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación económica), cree que suponen un mecanismo que aglutina todo en torno a una empresa líder y sin embargo “no presta toda la atención a las pymes”.
“España es un país de pymes”, reivindica Bonet, quien cree que para transformar el país la “clave” reside en transformar estas compañías o “como mínimo ayudarlas a hacerlo” con “sensibilidad, medios y formación”, y sobre todo ayudándoles a su “reinvención” de los negocios ante una “realidad dramática” en determinados sectores, como el comercio de proximidad que está “totalmente dislocado”.
“Las personas, ante una crisis de la ferocidad del coronavirus, deben enfrentarse a sí mismas. O te rindes y mueres; o luchas y te superas adquiriendo nuevas competencias y repensando el negocio de principio a fin. Esto no es nada fácil y requiere del auxilio de una estrategia capilar, como lo es la estructura de las cámaras españolas, y accesible”, ha predispuesto.
Ve “difícil” salvar el verano y pide mayor atención al turismo
Asimismo, Bonet remarca que habría que hacer hincapié en dos aspectos que “no están correctamente reflejados” en el Plan, como son el turismo y la internacionalización e insiste en la importancia de que los trabajadores adquieran competencias digitales, sobre todo las pymes, y en repensar los negocios “de principio al final”.
En materia de internacionalización apunta que en 2008 se fueron 300.000 empresas y poco a poco se fraguó el “éxito” del sector exterior español, algo que cree que debe suceder de nuevo ahora con la crisis del Covid ya que las empresas con posición en mercados exteriores sobrellevan mejor las turbulencias económicas, por lo que pide un mayor peso a este aspecto en el Plan de Recuperación.
También ha lanzado la voz de alarma sobre la necesidad de prestar atención en la concesión de ayudas al sector del turismo, ya que cree que si no reciben ayudas las empresas (viables) del sector no aguantará otro verano y ya ve “muy difícil” poder salvar la temporada estival de este año.
A este respecto, apela a un estudio realizado por la Cámara de España que pone en evidencia el efecto arrastre del turismo, y es que “España vive del turismo” por lo que pide tener “cuidado” con el sector y cree que su remontada dependerá del proceso de vacunación y de la conectividad aérea, ya que todavía muchos Estados mantienen una política proteccionista.
“España ha sido el que ha puesto menos recursos”
“La recuperación del sector será lenta”, augura Bonet, que ve “insuficientes” las ayudas aprobadas hasta la fecha, por lo que enfatiza que “los gobiernos deben prestarle ahora la atención que antes le han negado” ante el valor “indiscutible” del liderazgo turístico español y en un contexto en el que “Bruselas tampoco hace los deberes”.
“Es hora de que se dé al turismo lo que le corresponde por su peso en la economía española y europea, que es muy superior al que indican las cifras directas. Ser líder es muy importante”, ha remachado.
No obstante, lamenta que hasta ahora “España ha sido el que ha puesto menos recursos” seguramente porque “es el país que, probablemente, tiene la peor situación en sus cuentas públicas”. “La contundencia de la ejecución de las ayudas hasta ahora no ha sido la que me gustaría”, pero celebra que Bruselas “se ha puesto las pilas” con el fondo de reconstrucción y “ahora el Gobierno tiene que hacer lo mismo”.
En este sentido, frente a los que insisten en el peso de la deuda defiende que “en una situación de vida o muerte hay que salvar realmente a todo aquel que sea viable sin otras consideraciones”. “Me preocupa la deuda, pero más salvar el pellejo”, ha apostillado.
La recuperación, en 2023
Tras la revisión de previsiones realizada por el Gobierno, que sitúa el crecimiento en un 6,5% este año, frente al 9,8% que pronosticaba anteriormente, Bonet agradece la revisión más “realista” de las estimaciones. La Cámara de Comercio de España estima que la economía española crecerá este año un 5,9%, mientras que en 2022 se moderará al 4,5%, y aunque Bonet se muestra “optimista” respecto a que la recuperación se iniciará ya en la segunda mitad del año en curso, habrá un 2022 “normal” y aplaza la recuperación completa, es decir, la vuelta a los niveles de PIB precrisis, para el año 2023.
Eso sí, cree que la recuperación dependerá sobre todo del proceso de vacunación y si se cumple el “razonable” objetivo de que en agosto se alcance un 70% de la población adulta española inmunizada. Si se avanzase con mayor rapidez, la recuperación llegaría al remontar antes la campaña turística de verano.
El presidente de la Cámara de Comercio de España, en todo caso, se muestra “optimista” por la colaboración público-privada y por el hecho de que “cuando estás a punto de desaparecer, reaccionas”, a lo que se suma que el Gobierno “está dispuesto a poner medios”.
Ve una “temeridad” una reforma fiscal ahora y “fuera de lugar” subir el SMI
Tampoco ha mostrado preocupación sobre las posibles disensiones en el seno del Gobierno, ya que “quien manda es Pedro Sánchez”, en cambio si ha subrayado que sería una “temeridad” acometer una reforma fiscal “en un momento como este”.
El pasado lunes se constituyó el grupo de expertos que revisará el sistema fiscal con febrero de 2020 como fecha límite para sus conclusiones, si bien la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, mostró su intención de subir Sociedades, Sucesiones, Donaciones y Patrimonio en enero en el marco de los Presupuestos.
A juicio de Bonet, hay que “estudiar una buena reforma fiscal que no se cargue los motores del sistema” y no ahora “deprisa y corriendo” meter impuestos por mucho que los necesiten”, máxime cuando “el problema del endeudamiento no se resolverá en un año. Y seguramente no tendrá solución sin inflación”. “En este momento no se deben poner palos en las ruedas”, ha zanjado.
De igual forma, se ha mostrado en contra de una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en la actualidad, ya que “estaría fuera de lugar”, mientras que sí respalda algunas de las medidas aprobadas para los colectivos con menos recursos, como el Ingreso Mínimo Vital.
Preguntado sobre cómo valora la gestión realizada por Podemos en el seno del Gobierno, ha defendido que “en un país como España, una economía social de mercado, las políticas tienen que ser coherentes con este sistema”, por lo que “quien pretenda una política distinta está equivocado”, ya que “una cosa es apoyar el ingreso mínimo y otra gripar los motores económicos”.
”La economía social de mercado es la mejor variante del capitalismo”, ha sentenciado, al ver “muy peligroso” el capitalismo de Estado y rechazar el “liberalismo rampante”.
“Las empresas que se fueron de Cataluña no volverán si sigue la anomalía”
Respecto al ‘procés’ en Cataluña, ha insistido en que “lo que no puede ser no puede ser y, además, es imposible”, en referencia a la pretendida independencia promovida por algunos partidos, y para contrarrestarlo a instado a reconstruir la situación con “paciencia y diálogo”.
De cualquier forma, Bonet ve un «punto de inflexión” en los 700.000 catalanes que no acudieron a votar a las urnas en las últimas elecciones, por lo que aboga por “hablar” con esa parte del electorado para “reconstruir” y dejar atrás la “anomalía” política que perdura. Mientras esta continúe, ha avisado de que no volverán a Cataluña las empresas que desde 2017 han trasladado su sede social fuera de la región, ya que precisan de estabilidad y seguridad jurídica.
En lo relativo a las relaciones entre la Cámara de España y la de Barcelona ha sostenido que existe una relación “conllevancia” y ha hecho hincapié en que las cámaras tienen que ser “coherentes” con las necesidades del país y su sistema.
“Si eres una cámara que no sigues esa prioridad, estás yendo por los cerros de Úbeda”, ha dicho Bonet, quien ha indicado que en las reuniones en las que están presentes ambas instituciones camerales hace referencia a los principios básicos del país y la estabilidad necesaria y “nadie” le ha desmentido al respecto.
“Las cámaras están para ayudar a las empresas y no para otro tipo de devaneos que no tocan”, ha apostillado.
El presidente de la Cámara de España ha señalado también que algunas de las 85 cámaras territoriales deberían pensar si pueden funcionar de una forma más eficiente y unirse con otras, si bien ha recordado que la ley de 2014 elimina la relación jerárquica entre la Cámara de España y las territoriales, de forma que ante cualquier problema en un cámara la tutelante es la autonomía correspondiente.