Calviño huye del pesimismo que certifican los datos de consumo y recaudación

«La economía española sigue fuerte». «Hay buenas razones para mirar al futuro con confianza». Así se refirió este jueves la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, a la situación económica que vive nuestro país , dejando a un lado los riesgos y afrontando los próximos meses «con determinación». «Sin complacencia, pero sin pesimismo», indicó.

Estos mensajes encajan con la reacción del Ministerio a la última revisión del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre los datos de contabilidad nacional. El INE ha empeorado la que ya era una grave caída del producto interior bruto (PIB) en 2020, a causa del coronavirus, hasta el -11,3%, frente al -10,8%.

El INE también ha revisado el PIB de 2021, en este caso al alza, hasta el 5,5% frente al 5,1%. Ante este incremento, el departamento que dirige Calviño ha señalado que «certifica la fuerte recuperación de la economía española que vienen mostrando todos los indicadores económicos, impulsada por la fortaleza de la demanda interna y el buen comportamiento del mercado laboral».

Asuntos Económicos evita la mención a la revisión a la baja y se centra en destacar el buen músculo que, aseguran, muestran los datos macroeconómicos. Sin embargo, este discurso contrasta con la preocupación que admiten en privado fuentes del departamento.

Fuentes del Ministerio reconocen que los próximos meses serán complejos y, por ello, el Gobierno no descarta nuevas medidas para amortiguar el impacto económico que puedan sufrir las empresas y las familias. Calviño asegura que los precios han empezado a moderarse y confía en que la inflación siga esa senda.

«El nuevo ciclo económico proporciona una mayor resiliencia», afirmó este jueves, cerrando la puerta a las amenazas de recesión que sí ha detectado la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).

«El nuevo ciclo económico proporciona una mayor resiliencia»

La vicepresidenta puso en valor el Plan de Recuperación y la evolución del mercado laboral. Sin embargo, los últimos datos de ejecución del plan, muestran que el Estado solo ha realizado pagos por valor de 4.500 millones de euros, un 15% de los 28.246 que presupuestó para este año.

En el ámbito laboral, el paro ha aumentado en los últimos dos meses y en términos absolutos, la afiliación a la Seguridad Social se redujo en el mes de agosto.

Consumo

Además de los mencionados, hay otros datos que empiezan a ser más débiles. Uno de ellos es el consumo. Tal como publicó este periódico, pese al incremento del gasto privado del 3,2% en el pasado trimestre, este se situaba todavía un 5,3% por debajo al registrado en el último trimestre de 2019, según datos de CaixaBank Research.

La encuesta a empresas y consumidores de la Comisión Europea también muestra cierto pesimismo entre los españoles. Las expectativas sobre las grandes compras se hunden y siguen por debajo de la media histórica, y es que la incertidumbre internacional pesa en las decisiones de consumo más importantes.

Con el fin del verano llegan también meses más oscuros para el turismo, una de las grandes bazas de la recuperación. BBVA Research alerta de cierta ralentización del consumo en los próximos meses, ya que las reservas turísticas comienzan a perder fuerza, a medida que acaba el verano. Además, indican que «a partir de la primera semana de agosto, el crecimiento empezó a desacelerarse y los niveles de consumo han convergido progresivamente a los de 2021». 

Recaudación

También la recaudación muestra cierta moderación. Aunque los ingresos siguen siendo extraordinarios y más si se comparan con los del pasado año, tanto la inflación como la comparación con meses en los que ya no había restricciones están empezando a reducir los ingresos extra del Estado.

La AIReF ya advierte que en los próximos meses se acentuará esta contribución del IVA y el IRPF a los ingresos públicos y cree que los recursos vendrán de las inversiones del Plan de Recuperación.

En el mes de mayo, por ejemplo, los ingresos por el impuesto sobre la renta de las personas físicas eran un 29,7% superiores a los del mismo mes de 2021. En julio, la diferencia era de un 21,7%. En el caso del IVA, los crecimientos han pasado del 34,3% en mayo, al 8,9% en julio. También hay que tener en cuenta que en el último mes se han producido mayor volumen de devoluciones.

Ante estos datos, Calviño cree que el Gobierno debe «actuar con determinación y con eficacia para tratar de contener el alza de los precios, apoyar a los colectivos más vulnerables y apoyar a empresas y familias».