Calviño fecha en 2023 el tipo mínimo del 15% en Sociedades a multinacionales en la UE

Avances y reticencias. Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea han cerrado avances para implantar en 2023 un tipo mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades para las grandes multinacionales a nivel europeo, pero no se ha terminado de cerrar el acuerdo ante las reticencias de países como Suecia, Polonia o Malta.

En la rueda de prensa posterior al a reunión de los ministros de Economía y Finanzas de los Veintisiete (Ecofin), la vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, ha detallado que se ha avanzado en la transposición a Europa del acuerdo internacional alcanzado el año pasado en el seno de la OCDE y el G-20 para la aplicación de un tipo efectivo mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades a las grandes multinacionales en la UE.

«España ha apoyado decididamente la reforma de las normas sobre tributación de beneficios de Sociedades», ha explicado Calviño, quien ha defendido evitar una carrera impositiva a la baja que «empobrece a todos». Por ello, ha desvelado que se ha avanzado en aras de lograr en el Ecofin del próximo mes de abril un acuerdo acuerdo definitivo en el Consejo y poder garantizar su entrada en vigor en 2023 con el fin de avanzar hacia un sistema fiscal internacional más justo».

Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea no han logrado en la reunión de este martes cerrar el acuerdo sobre esta tributación mínima de las multinacionales ante las reticencias de países como Malta, Polonia o Suecia por no incluirse también el gravamen específico sobre los gigantes digitales y por discrepancias sobre la entrada en vigor de la directiva, inicialmente prevista para el 1 de enero de 2023, pero que en el documento de Francia remitido a la mesa se postergaba a 2024.

Mecanismo de ajuste de carbono en frontera

La otra gran propuesta legislativa de calado abordada por el Ecofin sí se ha saldado con acuerdo al consensuarse el mecanismo de ajuste de carbono en frontera, que gravará de forma gradual las importaciones de países menos firmes en la lucha contra las emisiones contaminantes para evitar una situación de desventaja competitiva con los productores europeos.

Más allá de estas propuestas, Calviño ha explicado que se ha marcado la prioridad de dar el apoyo necesario a Ucrania y «maximizar» la eficacia de las contundentes sanciones contra Rusia, además de haberse coincidido en que España es uno de los países menos expuestos de manera directa al conflicto, pese al impacto en el alza de los precios en la energía y otras materias primas.

De igual forma, ha insistido en la urgencia de desacoplar los precios del gas de la electricidad para evitar que ciudadanos y empresas europeas paguen la factura de la «guerra de Putin», así como reforzar la autonomía estratégica. Calviño confía en próximas medidas «positivas» por parte de la UE que permitan «inmediatamente» adoptar la medida propuesta por España de topar los precios en los mercados mayoristas.

Precisamente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunirá ya este miércoles en Madrid con el primer ministro de Croacia, Andrej Plenkovic, y por la tarde viajará a Eslovaquia en el marco de su agenda europea para abordar y recabar apoyos con el resto de líderes del continente la propuesta española de desacoplar el gas del mercado eléctrico que se dirimirá en el próximo Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo. El viaje se completará con una visita a Rumanía y otra a Italia, donde se prevé que coincidirá con representantes de los gobiernos de Portugal y Grecia, así como con visitas a Alemania e Irlanda.

Calviño defiende que España ha iniciado el ajuste fiscal

De otro lado, al ser preguntada sobre la posición del Eurogrupo de que los países más endeudados comienzan a realizar su ajuste fiscal en 2023 pese al contexto de la guerra en Ucrania, Calviño ha defendido que España ya ha comenzado a reducir sus niveles de déficit y deuda sobre PIB en 2021 y continuará con esa senda de «responsabilidad fiscal» en la senda que le remita a Bruselas en el marco del Programa de Estabilidad que se remitirá a Bruselas en abril.

En este sentido, ha recordado que España ya redujo su ratio de deuda pública con respecto del PIB en 1,3 puntos en 2021, hasta el 118,7% del PIB, y que, a falta de conocer los datos de cierre del ejercicio para el déficit, la previsión apunta también a una reducción importante, que «estaría incluso por debajo de la previsión del Gobierno» de un desajuste del 8,4% del PIB. La AIReF estima que incluso podría situarse por debajo del 7%.

La vicepresidenta primera del Gobierno ha subrayado que hay «coordinación» en la política fiscal y el Ecofin valora las orientaciones de la Comisión que guían en un contexto «Muy cambiante» con una perspectiva «realista y pragmática que responderá a la evolución geoestratégica y económica en los próximos meses». Organismos como el FMI, el Banco de España o AIReF apremian al Gobierno español a diseñar un plan de ajuste para dar confianza.

«Observo un gran consenso sobre la necesidad de adoptar una posición pragmática y basada en la realidad a la hora de aplicar las reglas fiscales», ha insistido, detallando que los ministros económicos de la UE han acordado que se adoptará una decisión respecto a las reglas fiscales de 2023 en el momento en el que la Comisión publique sus previsiones de primavera.

Sobre la posibilidad de adoptar un nuevo programa de deuda conjunta para afrontar las consecuencias económicas del conflicto, Calviño se ha limitado a indicar que «todos los países se han mostrado abiertos a la adopción de las medidas e instrumentos que sean necesarios» pero consideran que en el momento actual ya se dispone de «instrumentos que permiten ir avanzando en la respuesta a corto y medio plazo».

Según Calviño, España cuenta con un Plan de Recuperación «muy bien orientado para hacer frente a retos que se han hecho todavía más urgentes a la luz de esta situación geopolítica», destinando un 40% a la transición ecológica, una línea orientativa que se reflejará también en el momento de la solicitud de los 70.000 millones de créditos que le corresponden a pedir en los próximos meses.