Calviño descarta bajadas de impuestos y desaprueba que Ayuso deflacte el IRPF
La vicepresidenta Nadia Calviño defiende que España ya desarrolla una política fiscal prudente como pide Bruselas y apremia a revisar las reglas fiscales
No a la deflactación del IRPF de Madrid ni a las bajadas generalizadas de impuestos. La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, ha sido clara al desaprobar la medida anunciada por Isabel Díaz Ayuso para compensar a los madrileños por la inflación en el IRPF al ser «muy claras» las recomendaciones de Bruselas respecto a no adoptar medidas que comprometan la responsabilidad fiscal.
Así se ha expresado Nadia Calviño en declaraciones a los medios en el marco de la reunión del Eurogrupo, en un contexto en el que la Comisión ha presentado su paquete de previsiones rebajando las de España aun «crecimiento fuerte» del 4% y ha consensuado aplazar un año más las reglas fiscales, hasta 2023.
Calviño ha desaprobado la deflactación de la tarifa del IRPF anunciada este lunes por Ayuso para la Comunidad de Madrid al señalar que «las recomendaciones de la Comisión son muy claras respecto a no poner en este momento en riesgo el objetivo de responsabilidad fiscal y no abordar modificaciones fiscales generalizadas».
En este sentido, ha indicado que la posición del Gobierno es «muy clara» respecto a la conveniencia de adoptar bajadas de impuestos, sí, pero «selectivas» para beneficiar a los salarios y colectivos vulnerables y actuar de forma responsable y «más eficaz posible» ante le impacto de la guerra.
El Ejecutivo rechaza, en cualquier caso, acometer bajadas selectivas generalizadas y, por ello, se opone a la deflactación de la tarifa del IRPF que promulga el PP y que ya ha anunciado Ayuso en Madrid, planea Juanma Moreno para Andalucía si revalida mandato tras las elecciones del 19 de junio, tal y como adelantó este medio, sumándose ambas a País Vasco y Navarra.
Lo cierto es que el Gobierno mantiene una ‘guerra fiscal’ abierta con las regiones del PP al rechazar la política de bajadas de impuestos que abanderan los ‘populares’ por considerarlas contraproducentes en el momento actual y por generar un ‘dumping’ fiscal entre regiones.
Pide revisar las reglas fiscales
La vicepresidenta también ha valorado el planteamiento de Bruselas de aplazar un año más, hasta finales de 2023, la prórroga de la cláusula de salvaguarda del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, si bien ha insistido en la necesidad de revisar en este periodo de suspensión de reglas fiscales dichas normas.
«No se entendería en un momento de tanta incertidumbre que se restaurase no volviesen a aplicar tal cual unas reglas que tienen que ser revisadas a las necesidades presentes y futuras de inversión de la UE», ha apostillado.
Por ello, ha apremiado a la Comisión a que «cuanto antes» ponga sobre la mesa el asunto de las reglas fiscales «con tiempo suficiente para tener el debate necesario» y el trabajo técnico para adaptarlas. Tras concitar un «amplio acuerdo y apoyo» la prórroga de la suspensión de reglas cree que «no debería retrasar el necesario trabajo» de revisar las normas que pone límites al déficit y la deuda de los Estados miembros.
Este lunes Bruselas ha vuelto a avisar sobre los desequilibrios de deuda y paro de España, si bien Calviño ha precisado que España está actuando con esa «prudencia» fiscal que demandan las autoridades europeas, ya que el año pasado redujo su déficit 3,3 puntos, hasta el 6,76% del PIB, y la deuda pública en 3,5 puntos, hasta el 118,4% del PIB.
Además, la previsión es seguir con una senda «intensa» de reducción de desequilibrios que rebajen el déficit al 5% este año y la deuda al 115,1%, para finalizar el horizonte de proyección en 2025 con un desajuste por debajo del procedimiento de déficit excesivo del 3% y una ratio de deuda menor al 110% del PIB.
Adenda para los créditos del Plan de Recuperación, en el segundo semestre
La vicepresidenta primera también ha explicado de nuevo que España presentará en el segundo semestre una adenda al Plan de Recuperación, incorporando cualquier transferencia adicional, movilizando los créditos de 70.000 millones aún no solicitados para «poder incidir y reforzar todos aquellos programas que van justamente en la dirección de reforzar la autonomía estratégica de Europa en el ámbito energético, en el ámbito tecnológico.
A finales de junio la Comisión dará a conocer los datos finales de la asignación del Mecanismo de recuperación y resiliencia en los distintos Estados miembros, de forma que, una vez el Gobierno disponga de la a asignación definitiva en el caso de España, preparará la adenda para presentarla en la segunda parte del año.
La idea para esta segunda fase de inversiones del Plan de Recuperación es cubrir las posibles transferencias adicionales, movilizar los créditos y también cubrir el nuevo apartado de REPowerEU (plan de Bruselas para la desconexión energética de Rusia) de la eficiencia energética y la autonomía estratégica en el ámbito energético.
Según Calviño, las prioridades actuales de autonomía estratégica y transición en ese campo ya habían sido identificadas por parte del Gobierno de España y que estaban recogidas en el Plan de Recuperación, que destina un 40% a transición verde y un 30% a digital.
Sin ir más lejos, el Consejo de Ministros aprobará este martes el PERTE para el diseño y producción de microchips en España, que se suma a otros diez en el ámbito de la economía circular, las renovables, el almacenamiento de hidrógeno verde, la digitalización del ciclo del agua, proyectos «muy alineados» con la recomendaciones específicas de Bruselas a España, ha remachado Calviño.
Así las cosas, España movilizará el 100% de los créditos asignados cuando se presente la adenda correspondiente, después de una primera fase de 60.000 millones en transferencias. «En esta segunda fase vamos a movilizar tanto cualquier transferencia adicional que se asigne España como el conjunto de los créditos, y también activar las inversiones recomendadas dentro de esta comunicación REPowerEU, que presentó la Comisión Europea la semana pasada”, ha precisado.