Caixabank se salva de las rebajas y dispara beneficios
Caixabank gana 704 millones, un 75% más, con incrementos de todos sus márgenes y la aportación creciente de BPI
Trimestre récord para Caixabank. La entidad, que en todo 2014 ganó algo más de 600 millones, en solo tres meses de 2018 ya ha superado esa cifra y se ha situado al frente de la gran banca en cuanto a rentabilidad. Gracias a ello, disparó su beneficio en el primer trimestre hasta los 704 millones, el 74,7% más que en el mismo periodo de 2017.
Mientras que el Santander, BBVA y el Sabadell sufrieron con los márgenes –reflejo de la evolución de la actividad bancaria–, Caixabank se salvó de las rebajas y logró ponerlos todos en verde. El margen de intereses del banco que dirige Gonzalo Gortázar subió el 4,3%, hasta los 1.203 millones, con las comisiones subiendo el 6,4% (625 millones).
BPI aporta 169 millones a los beneficios de Caixabank en el primer trimestre
Así, el margen bruto se incrementó el 19,5%, hasta los 2.262 millones, gracias también al incremento de las ganancias por activos financieros y al resultado de las participadas, que pasaron de aportar 85 millones a 266. En este capítulo merece especial atención BPI.
La entidad portuguesa, integrada en febrero de 2017, aportó 40 millones a las cuentas de Caixabank con su negocio bancario y 169 millones en total, teniendo en cuenta sus participaciones.
Caixabank mantiene 5.800 millones de adjudicados
El margen de explotación ascendió hasta los 1.110 millones, el 40% más, y el resultado neto pasó de 403 a 704 millones. Como el resto de bancos, el que preside Jordi Gual también redujo las provisiones, de 370 a 50 millones.
Caixabank redujo en dos décimas la tasa de morosidad, que a 31 de marzo era del 5,8%, y mantuvo la cobertura de adjudicados en el 58%. Las provisiones para insolvencias de la entidad son de 7.597 millones, mientras que tiene en su balance todavía 5.810 millones de adjudicados netos para la venta. Es decir, ladrillo esperando comprador.