Request-to-Pay, el nuevo servicio de Caixabank que agiliza los pagos (y es pionero en Europa)
El sistema Request-to-Pay no solo permite acelerar los pagos sino también facilitar el reclamo de las transferencias demoradas
Desde el pasado 22 de junio Caixabank se convirtió en el primer banco de Europa en poner en marcha el sistema de Solicitud de Pago, o como se lo conoce en el ambiente de las finanzas, ‘Request-to-Pay’.
Para ello Caixabank trabaja junto con la entidad Iberpay, cuyas plataformas tecnológicas acaban de obtener sus certificados de homologación del EPC (European Payments Council), el organismo comunitario encargado de desarrollar los estándares de pago en el área SEPA (Single Euro Payments Area).
Además, Caixabank se prepara para lanzar el primer servicio comercial que permitirá a las empresas facilitar las reclamaciones de recibos impagados por sus clientes; servicio que se realizará a través de la mensajería Request-to-Pay.
Qué es el Request-to-Pay (Solicitud de Pago)
Cabe precisar que este no es un método de pago, sino un mecanismo que solicita el abono de una operación, y esa modalidad que se puso en marcha en el 2020 en la UE para agilizar y simplificar los cobros en el territorio.
El objetivo es que la mayoría de los bancos españoles estén integrados en el sistema de Solicitud de Pago para agilizar la transferencias entre empresas y particulares
Por medio de esta Solicitud de Pago tanto las empresas como los particulares pueden solicitar pagos instantáneos a sus clientes o contrapartes de forma digital “y sin fricciones”.
A diferencia del pago tradicional, aquí el proceso lo inicia el destinatario de la operación (en lo que se conoce como pago pull), lo que complementa las transferencias instantáneas que son las denominadas push.
Cómo funciona este sistema
Para ello, en el esquema de Solicitud de Pago se dan cita cuatro figuras: el vendedor, el comprador, la entidad bancaria del comprador y el proveedor de servicios de pago del vendedor.
En el sistema de pago tradicional el que inicia el pago es el comprador, ya sea por transferencia bancaria al recibir la factura o introduciendo los datos de pago en una tienda virtual.
Pero con este nuevo sistema, es el vendedor el que inicia el pago hacia la cuenta del comprador, y sin necesidad que este intervenga.
La Solicitud de Pago se pone en marcha cuando el vendedor lo solicita al comprador, que tendrá que aceptarla (o en todo caso rechazarla), y la transacción no termina hasta que este último da su luz verde final.
En caso que sean pagos recurrentes, la autorización se hace de forma automática, donde el pago se inicia en la cuenta del comprador cada mes.
Otros bancos en espera
Ya hay otros bancos españoles que están desarrollando sus sistemas para adoptar este nuevo servicio, y también están trabajando con Iberpay en su certificación.
El objetivo final es que se cree un efecto red, donde el sistema de Request-to-Pay se extienda masivamente a nivel sectorial, y permita facilitar las soluciones de pago instantáneo y digital.
Según precisan en Caixabank, así como en 2017 la banca española fue pionera en las transferencias instantáneas, ahora da un paso adelante en del desarrollo de nuevos servicios de pagos digitales, que sean “24×7 para sus ciudadanos y empresas”.