Caixabank va de Isidro a Fainé
Jordi Gual y Gonzalo Gortázar agradecen su labor al expresidente en la primera junta de Caixabank sin Fainé en el estrado
Faltan pocos minutos para que empiece la junta de Caixabank, los accionistas van cogiendo sitio y de repente un grupo se arremolina en un lado de la sala, justo frente al estrado que ocuparán los consejeros del banco. El responsable de este movimiento es Isidro Fainé. En su primera junta sin protagonismo programado, el expresidente de Caixabank es el primer protagonista.
FAINÉ OCUPA EL CENTRO de la primera fila de asistentes a la junta, pero no antes de saludar a todos cuantos acuden a estrechar la mano del antiguo jefe, pero que sigue siendo jefe por partida doble: porque su figura sigue estando muy presente en la gestión, como se encargarán de explicitar más tarde Jordi Gual y Gonzalo Gortázar, y porque es el presidente de la Fundación Bancaria la Caixa, primer accionista del banco a través de Criteria, con el 40% de las acciones.
COMO LEO MESSI. Fainé saluda a Josep Vilarasau, otro expresidente de La Caixa, y, como marca el protocolo, se sienta a su lado. Habla con él y con Tomàs Muniesa, consejero delegado de Vidacaixa, como los futbolistas en los partidos: tapándose la boca. Este partido empieza ya.
Fainé sigue siendo el jefe: porque preside Criteria y por su ascendente sobre Gual y Gortázar
Se inicia la junta con el discurso de Jordi Gual, presidente de Caixabank desde junio. Antes de entrar en materia, Gual recuerda a Salvador Gabarró, expresidente de Gas Natural y exvicepresidente de La Caixa, fallecido hace tres semanas. Tras este recuerdo, que tendrá también el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, Fainé recupera el protagonismo.
“UNA MENCIÓN MUY ESPECIAL” de Gual para Fainé: “Su liderazgo, su sentido de la anticipación, su optimismo y su vocación de servicio han sido vitales para el crecimiento y la expansión de Caixabank”. Fainé nombró a Gual, y éste se lo agradece regalándole los oídos. “Muchas gracias por ser un ejemplo y una gran referencia para todos nosotros”, sigue el presidente de Caixabank.
Ya cumplido con su antecesor, Gual repasa el año. Baja rentabilidad, más nuevas tecnologías, buen comportamiento en bolsa, líderes en España y ya en la Península Ibérica gracias a la compra de BPI. A la entidad portuguesa dedica unos minutos: “Nos convierte en el primer banco ibérico, y lo que es más importante, creará valor para nuestros accionistas”.
DEL PORTUGUÉS AL CATALÁN. Tras Gual toma la palabra Gonzalo Gortázar. Entre las virtudes del consejero delegado de Caixabank se encuentra la facilidad para aprender idiomas. Si en Lisboa, en febrero, cuando la entidad cerró la compra de BPI, sorprendió dando la rueda de prensa y respondiendo las preguntas en portugués, este madrileño se arranca con el catalán en la junta.
Gortázar sobre las cláusulas suelo: ‘A veces se evalúan comportamientos pasados con reglas nuevas’
LA OPERACIÓN ESTRELLA. Pronto empieza con los portugueses. En la entidad están orgullosos de la compra de BPI, su mayor hito internacional, cocinado por Fainé y culminado por Gortázar. “Es una operación muy importante, es la primera vez que adquirimos el control de una entidad extranjera de primer nivel”. El directivo cifra en 120 millones de euros las sinergias entre las dos entidades, y explica que en dos meses se empezarán a aplicar las nuevas operativas en BPI para conseguir dichas sinergias.
LAS CLAUSULAS SUELO son uno de los puntos calientes en el sector. Gortázar se disculpa, pero con la boca pequeña. “Es cierto que a veces nos equivocamos, por eso revisamos continuamente nuestros protocolos”, dice, pero también tira de excusas: “A veces se evalúan comportamientos pasados con reglas nuevas, y esto distorsiona las visiones”.
GORTÁZAR CIERRA EL CÍRCULO. El consejero delegado de Caixabank termina el discurso como lo empezó el presidente. Recordando a Salvador Gabarró y elogiando a Fainé, el presidente que le eligió para sustituir a Juan María Nin en la dirección del banco: “Quiero agradecer al señor Fainé su liderazgo. Ha sido un placer trabajar a su lado”. Todos encantados y Fainé, en primera fila, disfrutando de su primera junta desde la barrera, sin discurso ni preguntas impertinentes de los accionistas.