Bruselas certifica que los clientes del Popular huyeron con su dinero
El Banco Central Europeo culpa de la quiebra a la cúpula del Popular por no haber reducido los créditos dudosos
El Banco Central Europeo ha tirado de la manta y ha desvelado las razones por las que el Banco Popular, que sufría una crisis prolongada desde principios de año, terminó siendo rescatada in extremis con la adquisición apresurada del Banco Santander.
La entidad europea ha asegurado este martes que el Banco Popular no había reducido sus créditos dudosos en los momentos críticos antes de la quiebra. La entidad sufrió un “deterioro sustancial de liquidez” por la disminución de depósitos que sufrieron su mayor bajada el 31 de mayo, siete días antes de la quiebra técnica.
La entidad supervisora culpa a la antigua cúpula de la entidad por haber fracasado al hacer frente a sus créditos dudosos valorados en 37.000 millones de euros. Contaba con un ratio de cobertura del 45%, a pesar de que las provisiones habían ascendido a 5.700 millones de euros el año pasado. A pesar de que el banco negó la fuga de depósitos, el BCE confirma la huida, tras comprobar que la rentabilidad de la entidad y la calidad de sus activos eran malas.
Banco Popular: el 31 de mayo fue el día de mayor fuga de depósitos. Siete día después, el banco quebraba
“Pese a un stock de deterioros de valor de 17.000 millones de euros en el primer trimestre de 2017, no se había logrado una reducción significativa de los créditos dudosos”, explica el BCE en su reciente informe.
El seguimiento mediático
El supervisor europeo hizo un seguimiento detallado de la situación del popular a lo largo del año y antes de su quiebra. “Sufrió salidas de efectivo en todos los segmentos de clientes”, explicó el Banco Central Europeo en un informe no confidencial publicado este martes.
El 6 de junio Bruselas daba por hecho de que el Popular, sin capacidad para encontrar financiación en los mercados, estaba quebrando o a punto de quebrar. En ese momento, el BCE informó al Consejo de Resolución Única, que firmó la resolución que implicaba su venta al Banco Santander.
Para colmo de males, el Popular comenzó a recibir una cobertura mediática muy negativa que coincidió con la sustitución del consejero delegado, que llevaba menos de un año en el cargo. La conjunción fatídica terminó por desencadenar una crisis
También destaca que desde enero el Popular había sufrido una cobertura mediática negativa y que la sustitución de su consejero delegado, que llevaba menos de un año en el cargo, desencadenó otra ola de salidas de depósitos.