El BdE eleva el crecimiento al 2,3% en 2023, siete décimas más, gracias al vigor del sector exterior

El Banco de España mejora su previsión de crecimiento de la economía en 2023 hasta el 2,3%, siete décimas más que en su pronóstico anterior, gracias a una mejora de la actividad económica, fundamentalmente sostenida por el dinamismo del sector exterior, que compensa la debilidad del consumo interno.

De acuerdo con el informe de proyecciones presentado este lunes, el supervisor bancario prevé una aceleración de la actividad económica en el segundo trimestre de este año, en comparación con el anterior, con un crecimiento estimado del 0,6% entre abril y junio, una décima más que en los primeros compases del año.

Entre las razones que justifican la mejora del crecimiento, el Banco de España justifica el mayor dinamismo del mercado laboral, que favorece el consumo de los hogares; también la mejora en las exportaciones de bienes y servicios no turísticos, el despliegue de los fondos Next Generation EU, así como unos menores precios.

Presionan a la baja en las previsiones el endurecimiento de la política monetaria y la reducción paulatina de las medidas aplicadas en respuesta a la crisis energética. Además, dado que el turismo ha recuperado ya los niveles prepandemia, su contribución al crecimiento económico será cada vez menor, lo que le restará vigor.

Mejora «de arrastre»

Con todo, desde el Banco de España detallan que esta mejora de las previsiones es «fundamentalmente de datos pasados del segundo semestre de 2022», «no porque pensamos que se va a crecer más de lo que pensábamos en marzo», ha explicado durante la presentación del informe el director general de Economía y Estadística de la institución, Ángel Gavilán. «No cambiamos de manera significativa las perspectivas de los siguientes trimestres», ha advertido.

Esto es, la mejora en el crecimiento económico es gracias al efecto «de arrastre» por la revisión de los datos de la Contabilidad Nacional, pero a futuro aparecen señales «incipientes y débiles» de la evolución de la actividad.

Por lo que respecta a los precios, el IPC, en términos armonizados -comparable con Europa-, cerrará 2023 en el 3,2% de media, cinco décimas menos de lo estimado, mientras que subirá al 3,6% en 2024 por la retirada de las medidas de apoyo que ha aprobado el Gobierno. Solo en 2025, de acuerdo con la proyección del Banco de España, la inflación cerrará por debajo del 2%, la barrera del BCE. Entonces sería del 1,8%.

El mercado laboral sostiene el crecimiento

El vigor del mercado de trabajo, además de fomentar el crecimiento, también reducirá la tasa de paro. Así, en promedio anual el desempleo se quedará en el 12,2% este año, en tanto que bajará al 11,5% el que viene. Un desvío en comparación con las predicciones anteriores de casi un punto porcentual.

Esto resulta fundamental, ha destacado el responsable del departamento de Economía y Estadística, de cara a la recuperación del consumo privado, muy deprimido por los efectos de la inflación durante este año, pero que será la base del crecimiento económico para 2024, de acuerdo a lo proyectado.

«Una mejora de las perspectivas del mercado de trabajo y la percepción de los trabajadores de que perder el empleo es cada vez menor estimula el consumo, fundamentalmente por la reducción del ahorro con motivo de precaución», ha aseverado Gavilán.

El mayor crecimiento económico también será fundamental para la reducción de la deuda pública, que caerá en relación con el producto interior bruto gracias a un aumento del tamaño de la economía. Así, bajará del umbral del 110% este año, hasta el 109,7%, para rebajarse al 107,4% en 2024. Esto sí, para volver a repuntar de cara a 2025, cuando ascendería hasta el 108%.

«El Banco de España destaca la importante contribución de la política económica del Gobierno al actual ritmo de crecimiento de la economía española. Concretamente, destaca la eficacia de las medidas adoptadas para reducir la inflación y mantener el crecimiento a corto plazo. Además, subraya el importante papel de los fondos europeos a la hora de sostener la demanda interna en 2023 e impulsar la inversión en 2024», ha celebrado el Ministerio de Asuntos Económicos al conocerse las previsiones.