BBVA advierte a Sánchez: la economía española pisa el freno
BBVA Research acusa recibo de la evolución trimestral del 0,6% en la economía española, pero avisa que "fue menos dinámica que la esperada"
«El avance del PIB se mantuvo por debajo de lo esperado», afirma BBVA en su análisis del tercer trimestre de 2018. Un aviso al gobierno de Pedro Sánchez de que la bonanza económica está en peligro en el primer trimestre completo de los socialistas al frente del ejecutivo.
La división de análisis de la entidad bancaria hace alusión al 0,6% del crecimiento de la economía española que confirmó el INE el miércoles, con un impulso del consumo interno pero también un parón en las exportaciones.
«La contribución de la demanda externa fue negativa, ya que los flujos comerciales volvieron a retroceder de forma generalizada», dice BBVA Research. Los analistas del banco acusan recibo del avance de contabilidad nacional trimestral del INE, pero también aprovechan para recordar que el crecimiento se está lastrando.
«La evolución de la actividad entre julio y septiembre se mantuvo en línea con la registrada durante el semestre precedente (el 0,6% en promedio), pero fue menos dinámica que la esperada (un 0,7%, según BBVA Research). En términos interanuales, el avance del PIB se estabilizó en el 2,5%», agrega el documento.
Antes del último informe del INE, a mitad de octubre, el Gobierno rebajó la previsión de crecimiento para este año, del 2,7% al 2,6%, unos días después de que S&P Global Ratings hiciera lo propio, restando una décima a la previsión, pero en su caso rebajando el dato del 2,8% al 2,7%.
BBVA: El consumo evita el desaceleramiento, por ahora
Entre sus conclusiones del tercer trimestre, el servicio de estudios del BBVA dice que la demanda doméstica soporta a la actividad en el corto plazo, mientras que la externa vuelve a contribuir negativamente al crecimiento, tal como apuntaban los indicadores parciales de coyuntura.
En términos interanuales, la demanda interna sumó el 3% al crecimiento y el saldo neto exterior restó el 0,5%. Y la actividad no se desacelera todavía más gracias, en gran parte, a la recuperación del consumo y el repunte de la inversión privada, subrayan los analistas.
Por otra parte, el empleo aumenta pero la productividad sigue estancada, con dos trimestres seguidos de caídas. Mientras tanto, los costes laborales unitarios reales aumentan marginalmente, con una subida del 1,1% en la remuneración nominal por asalariado y un incremento del 1% en los precios.