BBVA adelanta la vuelta del nivel de PIB precrisis a 2022
BBVA Research constata una "recuperación acelerada" que le lleva a revisar en un punto el crecimiento de este año, hasta el 6,5%, y lo mantiene en el 7% en 2022, cuando cree que se recuperará el nivel de PIB precrisis, aunque avisa de riesgos como la inflación
La menor caía del PIB en el primer trimestre y el mayor crecimiento en el segundo de lo previsto, junto al avance de la vacunación, la mejora del entorno internacional o la llegada de los fondos europeos son los principales factores que han llevado a BBVA Research a elevar en un punto su previsión de crecimiento de la economía española este año, pasando del 5,5% que estimaba en abril al 6,5%.
Mantiene en cambio en el 7% el pronóstico de avance de PIB para 2022, ejercicio en el que cree que el PIB podría recuperar sus niveles precrisis gracias a la inercia positiva y las medidas de expansión fiscal, principalmente en la economía americana y en la Eurozona, por el uso del ahorro acumulado
Así se desprende del último informe ‘Situación España’ del servicio de estudios de la entidad, correspondiente al tercer trimestre del año y presentado este miércoles telemáticamente por el director de BBVA Research y economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia; el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, y el economista jefe para España, Miguel Cardoso.
La nueva previsión está en línea con la del Gobierno, que en su último pronóstico rebajó del PIB del 9,8% al 6,5% por el mal inicio del año, la borrasca Filomena y el retraso en la implementación de fondos europeos. Para 2022 coinciden en el avance del 7%.
El PIB crecerá entre un 2,3% y un 3,3% en el segundo trimestre
Doménech ha recordado que el momento de elaboración de las anteriores previsiones coincidió con la incertidumbre de la cuarta ola, y ahora con la quinta ola, pero finalmente el comportamiento resultó «algo mejor de lo previsto», y los datos de exportaciones en febrero y marzo sorprendieron al alza.
El fin del estado de alarma, el avance de la vacunación y la flexibilización de las restricciones han permitido un adelantamiento del crecimiento del consumo privado, han indicado Doménech y Sicilia, que han explicado que la mejor dinámica del crecimiento en el primer semestre y una «recuperación acelerada» lleva a revisar un punto al alza. La cuarta parte de la revisión al alza de un punto también se debe a la mejora económica de la Unión Europea, Estados Unidos y China.
Aunque la «sorpresa» al alza de las exportaciones de bienes en el primer trimestre no impidió que, como se esperaba, la economía se contrajera, si bien cedió menos de lo previsto, y a ello se suma que los datos del segundo trimestre apuntan a una vuelta al crecimiento, de entre el 2,3% y el 3,3% trimestral.
Esta dinámica se mantendrá en el tercer trimestre, «con una o algunas décimas más bajas», pero por encima de los dos puntos y conducirá a un crecimiento del 6,5% en el año. Según Sicilia, la recuperación mayor del ejercicio 2021 es «cíclica» y está basada en la apertura, las vacunas, el uso en exceso del ahorro, la buena marcha de las exportaciones y de la inversión en maquinaria y equipo, y no tanto por el programa Next Generation UE.
Crecimiento del 7% en 2022: el ahorro embalsado impulsará el consumo
De cara a 2022, el servicio de estudios de la entidad estima que el crecimiento del PIB podría alcanzar el 7%, y los factores que estarían detrás del repunte son el control de la enfermedad, la utilización del ahorro embalsado por las familias, la aprobación del Plan de Recuperación, la llegada de los fondos NGEU, las medidas de impulso del BCE y una elevada capacidad productiva sin utilizar.
De esta forma, en 2022 el PIB podría recuperar sus niveles precrisis, ya que BBVA Research espera que la bolsa de ahorro se vaya convirtiendo progresivamente en gasto, y es que una parte del ahorro acumulado ya se ha empezado a utilizar.
En total, calcula que la bolsa acumulada asciende a 68.000 millones de euros y, por tanto, el consumo podría aumentar en promedio entre un 1,1% y 2% en 2021 y 2022.
Paro y «fragilidad» por el alto déficit y deuda
Pese a la mejora, de previsiones, BBVA Research estima una tasa de paro del 15,7% este año y del 14,2% en 2022, con un alza del empleo equivalente a tiempo. completo del 2,9% y el 2,6%, respectivamente. Doménech ha incidido en el problema de la productividad, este parámetro aparente del factor trabajo crecerá un 3,6% este año y subirá un 4,4% en 2022.
La remuneración por asalariado subirá un 0,7% este año pero se incrementará un 3,6% en el ejercicio 2022, en tanto que el IPC crecerá de media anual un 2% y un 1,2% en cada ejercicio, con pérdida de poder adquisitivo en el primer caso y aumento en el segundo.
En cuanto a los desequilibrios presupuestarios, Doménech ha hablado de desconocimiento sobre la aportación de la reforma tributaria y ha indicado que las previsiones apuntan a que el déficit primario estructural, tras descontar la parte cíclica, se mantendrá muy elevado, en torno al 3%, así como un alto endeudamiento público que supone una “situación de fragilidad” a futuro.
Las previsiones de BBVA Research vaticinan que el déficit público cerrará en el 7,7% este año y el 5,5% en 2022, por debajo de las previsiones del Gobierno (8,4% y 5%), en tanto que la deuda pública sería del 119,2% del PIB y el 115,5%, respectivamente, tres décimas y cuatro décimas menos que lo pronosticado por el Ejecutivo.
Riesgos: preocupación por las reformas
En cuanto a los riesgos que podrían afectar a la recuperación, BBVA Research hace hincapié en que todo está supeditado al control de la enfermedad y, por lo tanto, a una vacunación rápida, así como las consecuencias sobre el empleo y el tejido productivo que deja la crisis, la implementación de los proyectos relacionados con el programa de reconstrucción europeo (‘Next Generation UE’)y el consenso político necesario para acordar las reformas.
Sicilia ha insistido en que los riesgos están relacionados con la pandemia, ya que las previsiones se han elaborado en un contexto de un aumento de los contagios en España, aunque se si logra contener podría haber incluso un riesgo al alza en la estimación del repunte del PIB del 6,5%, en función de cómo evolucione el turismo.
A medio plazo BBVA Research cree que todo dependerá de las reformas y de cómo se implemente el proceso de las ayudas del NGUE, así de cómo se corrijan las debilidades del mercado laboral. En este sentido, ha apuntado que el Gobierno deberá presentar en estos meses «una agenda de reformas a la que tendrá que dar el visto bueno la Comisión Europea». «Se presenta una oportunidad pero no aprovecharla también es un riesgo a la baja», ha avisado Sicilia.
En cuanto al turismo, ha apuntado que la recuperación del turismo internacional va más lento que el del turismo nacional, que ya ha recuperado el nivel de gasto del nivel de 2019. Sobre la inflación Doménech ha dicho que espera que la presión sobre los precios sea «transitoria«, pero «hay que estar vigilantes y evitar fetos de segunda ronda de espirales de aumentos de precios de rentas que terminen metiendo al a economía española en una dinámica que dificulte la recuperación y la transformación».
El repunte de la inflación y el cambio de objetivo del BCE
En cuanto a la política monetaria, creen que la política basada en la retirada de estímulos da margen para pensar que el proceso de retirada «va a ser lento», aunque habrá que «vigilar muy bien» los cambios de política de retirada de liquidez de los bancos centrales ante los riesgos de inflación.
«Habrá tensiones financieras, no quiero dar una señala de alarma porque la liquidez es enorme, no nos queda claro que tiene que haber corrección, pero si habrá mucha volatilidad porque en la media que se cambian expectativas (política fiscal, monetaria y vacunación) todo se refleja en volatilidad de los activos», ha explicado Sicilia.
Después de que el Banco Central Europeo haya mantenido su política monetaria acomodaticia y ha cambiado el objetivo de inflación al 2%, haciéndolo simétrico, BBVA Research establece que “ante un incremento de la inflación que sería transitorio, debido principalmente a su origen (el aumento en el coste de la energía), se prevé que el BCE mantenga el estímulo monetario”.
Así, el servicio de estudios de BBVA espera que en septiembre se anuncie la desaceleración en el ritmo de compras amparadas por el PEPP y que éste concluya en el primer trimestre de 2022. El otro instrumento de compra de activos (APP), se mantendría hasta el primer trimestre de 2023, mientras que los tipos de interés a corto plazo no comenzarían su ascenso hasta pasado ese período.
Los ERTE, el SMI y la reforma de pensiones
Por otra parte, sobre los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) el servicio de estudios de la entidad considera que necesitan» modificaciones urgentes» enfocadas a proporcionar las herramientas necesarias para que los trabajadores que se mantienen en esta situación y tienen escasas probabilidades de retornar a su puesto de trabajo, puedan «reorientar su carrera laboral”.
Preguntado por la intención de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, de subir el Salario Mínimo Interprofesional este año, Doménech ha dicho que desde el punto de vista de la cohesión social lo relevante es la recuperación del informe, y ha apuntado que el comité de expertos publico su informe “claramente hecho para satisfacer el compromiso de que el SMI alcance el 60% del salario medio”.
En todo caso, ha dicho que el comité no se pronuncia “claramente” sobre el ritmo de subidas y, en cualquier caso, ha remarcado la importancia de conocer el impacto de las subidas de 2017 y 2018 para evitar poner “en riesgo” el empleo de colectivos como los jóvenes.
También han valorado el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia al ser “suficiente, ambicioso respecto a su implementación y adecuado en su diagnóstico”, pero ven necesario un “calendario claro, detallado y accesible que dé certidumbre a las empresas sobre cómo aprovechar el Plan” y de un plan de reformas a acometer en los próximos años.
En este punto, sobre el sistema de pensiones han indicado que “aborda su suficiencia, pero no la sostenibilidad del sistema», ya que aumenta el coste al ligar las pensiones al IPC, y sólo podrá ser valorada en su totalidad una vez que se conozcan los detalles», como el mecanismo de equidad integeneracional.