Batalla salarial: CCOO y UGT impulsan cláusulas de revisión para anular a CEOE
Los sindicatos defenderán alzas salariales con cláusulas de revisión ligadas al IPC y se movilizarán frente a la moderación que planea CEOE
La batalla salarial está servida. CCOO y UGT se preparan para fijar este mismo jueves la acción sindical en las unidades de negociación de los convenios colectivos a nivel sectorial y de empresa con alzas salariales mayores y cláusulas de revisión con el IPC que anulen las directrices de moderación marcada por CEOE.
Los sindicatos pondrán en común la pauta a marcar en las negociaciones de convenio justo una semana después de que rompiesen negociación con CEOE para la subida salarial en el marco del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), llevando al traste el Pacto de Rentas reclamado por el Gobierno. La estrategia se elabora sobre todo en contraposición a las recomendaciones aprobadas por el Comité Ejecutivo de CEOE el martes en pro de la moderación salarial.
Las organizaciones sindicales han convocado a sus órganos (Ejecutivo y comité confederal) para abordar en el seno de cada sindicato la hoja de ruta salarial a batallar en las más de 4.500 mesas de negociación que determinarán las subidas salariales para unos 13 millones de trabajadores.
A continuación, dos delegaciones de las comisiones ejecutivas confederales de CCOO y UGT, encabezadas por sus secretarios generales, Unai Sordo y Pepe Álvarez, se reunirán para analizar la situación de la negociación colectiva y determinar así la acción sindical conjunta a llevar a cabo en la negociación de los convenios colectivos en los ámbitos sectorial y de empresa para impulsar un aumento de los salarios.
Alzas salariales mayores y cláusulas de revisión con el IPC
Fuentes sindicales anticipan a Economía Digital que está previsto que las directrices sindicales a recomendar en las unidades de negociación colectiva de las empresas giren en torno a la última propuesta realizada antes de romperse la negociación con CEOE: subida salarial del 3,4% este año, un 2,5% en 2023 y un 2% en 2024 a revisar con la inflación mediante las cláusulas de revisión salarial.
El objetivo de estas cláusulas es recuperar la pérdida de poder adquisitivo, resultante de la inflación media y el cierre de subida salarial del año, de forma que este podría recuperarse el 50% del diferencial entre ambos parámetros, otro 25% de recuperación en 2024 y para 2025 el esquema vincula el alza al dato del IPC de diciembre de 2024 más un 0,25 % adicional.
También está previsto que los sindicatos marquen a sus equipos negociadores la directriz de impulsar subidas incluso mayores, del 4% este año, en aquellas empresas y sectores con una mejor situación financiera y de la actividad.
Precisamente las cláusulas de revisión salarial fue el principal escollo que llevó a la paralización de las negociaciones ante las diferencias «insalvables», toda vez que los sindicatos lo marcan como línea roja, frente al rechazo de pleno frontal de CEOE.
Movilizaciones y tensión en los convenios
Tras la ruptura de la negociación, se preparan para tensionar las negociaciones mediante el bloqueo del desarrollo de los convenios colectivos en los puntos de la reforma laboral que benefician a las empresas, como pueden ser la ampliación de la duración de los contratos por circunstancias de la producción de seis meses a un año o la regulación de los contratos fijos discontinuos.
Las mismas fuentes también avanzan ya que con «mucha probabilidad» los sindicatos programarán movilizaciones para exigir la subida de los salarios, toda vez que el AENC permanece caducado desde 2020 y no están dispuestos a permitir que los trabajadores asuman el coste de la inflación con más pérdida de poder adquisitivo.
Por ello, los sindicatos despliegan ya una ofensiva con movilizaciones y huelgas a nivel sectorial, como está sucediendo ya estos días con la huelga del metal en Barcelona del martes, del lunes en A Coruña o las numerosas movilizaciones en Andalucía en distintas provincias y sectores.
Ante la mejora de los márgenes y excedentes de las empresas, los sindicatos están decididos a «Canalizar» el malestar y el descontento social que creen que irá ‘in crescendo’, tanto en el sector privado como en el público para el que exigen ya iniciar la negociación para la subida salarial.
Respuesta firme a las recomendaciones de CEOE
El movimiento sindical se producirá apenas dos días después de que CEOE haya fijado como recomendaciones a las empresas para las negociaciones de convenio la moderación salarial, instando a no subir los salarios con el IPC ni con carácter retroactivo, sino ligarlos a la productividad, el empleo o el PIB, compensar con planes de pensiones y parte variable, penalizando por el absentismo, y barajar la opción de los descuelgues de convenio.
Aunque la patronal ha evitado especificar una cifra tope oficial para que los sindicatos no puedan utilizarla como base en las negociaciones, en el seno de la organización se ha hablado de instar a nivel territorial a acometer subidas con un límite de hasta el 3,5%, un porcentaje que el propio presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha calificado de «razonable».
Precisamente la última propuesta realizada por CEOE antes de Semana Santa contemplaba una subida máxima del 8% en tres años: incremento del 3,5% este año, del 2,5% en 2023 y del 2% para 2024 y según la situación del sector y la empresa, en línea con la moderación de la inflación prevista para este periodo y sin contemplar las cláusulas de revisión salarial.
Las directrices de CEOE han despertado la crítica de los dirigentes sindicales. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ve una «respuesta inadecuada» al pretender ligar los salarios a la productividad en lugar de la a inflación. Álvarez carga contra la patronal al negarse a subir salarios a pesar de haber subido los precios (el IPC se sitúa en el 8,4% en marzo).
Ante la recomendación de CEOE de valorar los descuelgues Álvarez ve necesario derogar las partes que hacen referencia al descuelgue de los convenios colectivos dentro de la normativa laboral. El secretario general de CCOO, Unai Sordo, se muestra aún más crítico al calificar de «suicidio económico» las recomendaciones de CEOE, a quien afea su negativa a subidas salariales de calado pese a los 30.000 millones destinados a las empresas por los ERTE, los 139.000 millones en avales del ICO o los 70.000 millones de fondos europeos hasta 2026.
Sordo critica la «falta de corresponsabilidad» de los empresarios en un momento en el que los precios tardarán en bajar, porque el tope al gas hará que la inflaciÓn disminuya un 2% pero seguirá un IPC alto, y los problemas geopolíticos harán que el comercio internacional se resienta, por lo que la demanda interna es «decisiva» para salir de la crisis, siendo necesario el impulso de pensiones, prestaciones y salarios para estimularla.