Bankia se aleja de sus objetivos
El mantenimiento de los tipos de interés en el 0% frustra el crecimiento de Bankia, que se aleja de los objetivos para 2020 del plan estratégico
El pasado febrero Bankia presentó su plan estratégico hasta el año 2020. Un plan que, según el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, van cumpliendo, ya que aseguran que están «en buena línea». Sin embargo no todos los objetivos van igual de bien encaminados.
De hecho, Goirigolzarri tiene presentes las variables externas, que, asegura, no pueden controlar. Con esto se refiere al retraso del incremento de los tipos de interés, el menor crecimiento del crédito previsto y la evolución negativa del mercado de fondos.
En cuanto a la subida de los tipos de interés, que se esperaba para después del verano, el Banco Central Europeo (BCE) anunció la semana pasada que los mantendrá al 0% hasta finales de 2020 Los bajos tipos afectan especialmente a aquellas entidades que dependen más del negocio bancario básico y gran parte del negocio de Bankia se sostiene con las hipotecas.
Goirigolzarri cree que en los próximos meses habrá mejora en las condiciones de los tipos
«Sí creo que en los próximos meses tendremos algún tipo de subida o mejora de condiciones de los tipos de interés. Aunque nos haría mucha ilusión que subiera, no solo del BCE, sino del mercado», explica Goirigolzarri.
En caso de darse esta subida, augura que «afectará a las cuentas de 2020 y no a las de 2019». En el plan estratégico de Bankia se contaba con este aumento y por tanto parte de su plan se basaba en ella.
Así, el principal enemigo de Bankia es el estancamiento de los tipos de interés, que impacta negativamente en los márgenes y, por ende, en el beneficio de la entidad.
Cae el beneficio atribuido
Entre los objetivos que se marcaba Bankia a tres años, uno de los que parece ir más desencaminado es el beneficio atribuido, cuyo objetivo para 2020 se marca en 1.300 millones de euros. Sin embargo, pasa de los 816 millones registrados en 2017 a los 788 millones en 2018, una caída del 3,5%.
Lo mismo ocurre con el margen de intereses, que también se reduce respecto a 2017. En 2018 se sitúa en 2.050 millones de euros frente a los 2.267 millones del año anterior. El objetivo del plan estratégico es llegar a los 2.900. Esto supone que en dos años deben conseguir 850 millones de euros más.
En cuanto a las hipotecas, tienen la intención de llegar a una cuota del 10,8%. En 2018 se situaron en el 8,1% (7,3% en 2017). Goirigolzarri descarta que vaya a haber una burbuja inmobiliaria y explica que en el pico se llegaron a firmar 1,3 millones hipotecas en el pico inmobiliario y el año pasado se cerró con la firma 340.000 préstamos.
Cuota de crédito al consumo en los resultados de Bankia. Fuente: Bankia
En cuanto a los créditos al consumo, pasan del 5,5% de 2017 al 5,56% en 2018, mientras que el objetivo es el 6,6%. Elevar los créditos al consumo es un riesgo, ya que en España, la morosidad de este tipo de préstamos está elevándose, lo que además hace que su coste sea superior en el 60% respecto a la UE.
La Comisión Europea, el Banco de España y el Fondo Monetario Internacional (FMI) piden a la banca que sean más estrictos a la hora de concederlos.
Los fondos de inversión se quedan a 0,65 puntos porcentuales de los objetivos, tras haber aumentado solo el 0,15 puntos en un año. Así, pasa del 6,4% al 6,55%, cuando el objetivo se sitúa en el 7,2% para 2020.
Cumple con los objetivos de gestión
En cuanto a la reducción de los activos improductivos adjudicados y dudosos o NPA, la entidad presume de duplicar el objetivo anual, aunque lo cierto es que se sitúa en el 10,9%, muy lejos de la cuota por debajo del 6% que esperan conseguir en 2020.
No obstante, cumplen con los objetivos de gestión. Así, van bien encaminados en la evolución del negocio con el crecimiento del crédito a empresas, que pasa de la cuota del 6,9% al 7,26% en 2018. El objetivo fijado para 2020 es del 7,26%. También consiguen reducir el gasto.
Bankia obtuvo un beneficio atribuido de 703 millones de euros en 2018, lo que supone un incremento del 39,2% respecto a 2017. Esto se debe a la fusión con BMN, que en 2017 castigó el resultado con una caída del 37,3%, mientras que en 2018 impulsa el beneficio contribuyendo al incremento de los ingresos.