Banco de España defiende la reforma laboral de 2012 y exige a Díaz mantener los descuelgues
El gobernador del organismo supervisor ha cuestionado la nueva Ley de Vivienda porque los controles a los precios pueden tener un “efecto restrictivo” sobre la oferta
Sin posicionarse de una forma clara en el conflicto interno del Gobierno entre las dos coaliciones (PSOE y Unidas Podemos) por la reforma laboral a aprobar antes de fin de año, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, se ha pronunciado este lunes más en línea con las posturas de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, al defender en parte la utilidad de la reforma laboral de 2012 y pedir que se mantengan los mecanismos de ajuste empresarial con mecanismos de descuelgue en los convenios.
Hernández de Cos, que ha comparecido ante la Comisión de Presupuestos del Congreso para hablar del proyecto de Presupuestos, ha realizado una cierta defensa de la reforma laboral de 2012, defendiendo de forma indirecta su no derogación, en línea con Calviño, y ha apuntado a algunos elementos clave que hay que abordar en la reforma, muy similares a los que suele citar la vicepresidenta primera.
Sus palabras llegan después de que el pasado viernes se desatara una crisis interna en el Gobierno a raíz de que Unidas Podemos pidiera la convocatoria urgente de la mesa de seguimiento de la coalición para este lunes, al denunciar «injerencias» de Calviño en la negociación de la reforma laboral, ante el choque de Calviño con el departamento de la vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, por. ver quien lleva las riendas de las negociaciones con CEOE y sindicatos.
Sí a la reforma laboral de 2012 y los mecanismos de ajuste empresarial
Con la reforma laboral en el ojo del huracán mediático y político, Hernández de Cos ha avisado al Ejecutivo de que la política económica debe facilitar la adaptación de las empresas a la nueva realidad económica. Ello exige «permitir el uso de los mecanismos de ajuste que proporciona la legislación, en particular la laboral, y que estos se adapten a las condiciones específicas de las empresas», ha enfatizado, en una clara advertencia a Díaz de la necesidad de mantener estas vías de ajuste empresarial.
Y es que, según ha dicho, actualmente acontece uno de los momentos económicos de mayores reasignaciones entre empresas de sectores nuevos surgidos a raíz de la pandemia y de las políticas de lucha contra el cambio climático, por lo que ve «muy importante» que la legislación laboral mantenga la «flexibilidad» y la «capacidad de adaptación» y de «adecuación» a competencias específicas de las empresas. En este punto, ha hecho referencia específica a la prevalencia del convenio de empresa y a los denominados ‘descuelgues’.
Para reducir los daños potencialmente estructurales de la crisis, ha citado algunos de los aspectos claves que suele remarcar especialmente Calviño, y también Díaz, como reforzar las políticas de formación y las ayudas a la búsqueda de empleo que faciliten la reasignación de los trabajadores que han perdido su puesto de trabajo hacia los sectores más pujantes tras la pandemia.
Sin pronunciarse de forma expresa al conflicto en el seno del Gobierno, Hernández de Cos ha recordado que el organismo supervisor ha valorado la reforma laboral de 2012 «positivamente» en términos de capacidad para crear empleo en un momento económico «complejo» como el de entonces.
Esta afirmación se contrapone a la crítica velada que hace Díaz y su exigencia de derogar la norma laboral del anterior Gobierno del PP, también comprometido ya por el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, frente a las reticencias de Calviño de «hablar del pasado».
Eso sí, ha dejado claro que la reforma laboral de 2012 no solucionó los problemas persistentes del mercado de trabajo, como su dualidad ante la temporalidad, el paro de larga duración o las deficiencias en la formación. «No podemos tener un problema de temporalidad como el que tenemos en la economía española y que no apliquemos reformas, incluso algunas de ellas un poco atrevidas«, ha enfatizado.
Ley de Vivienda: el control de precios pueden restringir la oferta
De una forma más clara se ha ‘mojado’ sobre la nueva Ley de Vivienda que aprobará el Consejo de Ministros este martes, que habilitará a las CCAA a poder obligar a los grandes propietarios a bajar el precio de los alquileres mediante un índice de precios en zonas tensionadas y a los particulares a congelarlos, también con bonificaciones.
La Ley de Vivienda ha sido también uno de los elementos de fricción en el Gobierno, ante la exigencia de Unidas Podemos de limitar los precios de alquiler, frente a las reticencias del ala socialista, también de Calviño.
Hernández de Cos ha subrayado la importancia de evaluar las reformas que se puedan realizar y se ha referido al documento que publicó el organismo hace meses en los que abordaba el «problema real» de la accesibilidad de vivienda.
En este sentido, ha avisado de que los controles de los precios pueden tener efecto en el corto plazo pero en el largo plazo pueden generar un «efecto restrictivo» sobre la oferta y pueden provocar problemas adicionales, sobre todo en las zonas afectadas por las restricciones. En su lugar, defiende las políticas de fomento de la oferta.