El Banco de España advierte de los riesgos del ‘compra ahora y paga después’ para los hipotecados
El uso imprudente de las opciones de financiamiento inmediato puede generar falsas sensaciones de ahorro y sorpresas futuras
El Banco de España, como entidad reguladora y supervisora del sistema financiero en el país, ha puesto de manifiesto su preocupación respecto al riesgo de sobreendeudamiento y la impulsividad en las compras que pueden surgir como resultado del uso cada vez más extendido de las fórmulas de «compra ahora y paga después».
Estas opciones de financiamiento permiten a los consumidores adquirir bienes y servicios de manera inmediata, posponiendo el pago total para un momento posterior.
Si bien estas opciones pueden ofrecer beneficios atractivos para los consumidores, como la rapidez en la aprobación y la flexibilidad financiera al permitir el pago fraccionado de las compras realizadas, el Banco de España advierte sobre los posibles efectos negativos a largo plazo.
En su blog, el organismo explica que si se utilizan estas opciones de forma imprudente y se financian múltiples compras de esta manera, existe un riesgo real de sobreendeudamiento que puede comprometer las finanzas personales a medio y largo plazo.
¿Cuáles son los riesgos?
Uno de los factores de riesgo identificados por el Banco de España es la falsa sensación inmediata de ahorro que estas opciones pueden generar en los consumidores. Al poder adquirir bienes y servicios de forma inmediata sin pagar la totalidad del importe en el momento de la compra, los consumidores pueden sentir que están ahorrando dinero.
Sin embargo, si se acumulan múltiples compras financiadas de esta manera, los gastos recurrentes aumentan en el futuro, lo que puede llevar a una situación de sobreendeudamiento y dificultades para hacer frente a otras obligaciones financieras.
Además, debido a que estas opciones de «compra ahora y paga después» no se perciben como créditos convencionales, es posible que los consumidores no presten la misma atención a la información proporcionada durante el proceso de comercialización y contratación.
Esto puede dar lugar a sorpresas desagradables en el futuro, como la aparición de comisiones o intereses no esperados, que podrían afectar aún más la situación financiera de los consumidores.