La ayuda de 500 euros si tu trabajo son las tareas del hogar
La Renta de Inserción Activa otorga un respaldo económico a cientos de miles de personas que trabajan en la casa sin una compensación económica
A pesar del duro trabajo que hacen día a día por mantener y cuidar los hogares, las amas de casa no tienen ningún tipo de remuneración económica.
La gran mayoría de las personas que se hacen cargo de estas actividades son mujeres, que carecen de independencia financiera, y que no tienen ningún tipo de cobertura social en caso de enfermedad o incapacidad para realizar las tareas.
La ayuda de 500 euros si tu trabajo son las tareas del hogar
Para ayudarlas económicamente el Estado -a través del Servicio Estatal de Empleo Público (SEPE) cuenta con la Renta de Inserción Activa (RIA), que otorga una cuantía de 501 euros mensuales y que se puede recibir durante 11 meses.
La Renta de Inserción Activa es una ayuda económica de 501 euros y se otorga durante 11 meses
Pero no basta con realizar las tareas del hogar: esta ayuda se destina a personas en situación de vulnerabilidad económica, donde hay una serie de requisitos que cumplir para poder solicitarla.
Requisitos
Entre los requisitos se exige que la persona interesada debe contar con más de 45 año (pero menor de 65 años), ser ama de casa y no estar recibiendo ninguna otra prestación.
Además los ingresos no pueden ser superiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), o sea un monto de 750 euros.
Si se tienen hijos menores de 26 años a su cargo o mayores con discapacidad, así como menores en acogida, se considerará que cumple con el requisito de carencia de rentas cuando la suma de ingresos de los miembros de la unidad familiar no supere al 75% del SMI.
Tampoco se puede solicitar si antes se recibía la Renta de Inserción Activa.
Cómo solicitar la RIA
Esta ayuda se puede solicitar de cuatro formas: una es a través de la sede electrónica del SEPE, otra es de manera presencial en las oficinas de este organismo. También es posible gestionarla en las delegaciones de registro público o por medio de un correo administrativo.
Además de aportar el modelo oficial de solicitud, las personas deben enseñar su identificación, así como la del cónyuge y las de los hijos que estén a cargo.
También hay que presentar algún documento que indique el número de cuenta bancaria del solicitante (del que tiene que ser titular), así como el Libro de Familias o el certificado de Registro Civil de nacimiento o familia.
Es posible que el SEPE solicite la declaración de la Renta, para justificar el nivel de ingresos.
Y en caso de tener hijos mayores de 26 años con discapacidad, se debe entregar el certificado de discapacidad y el grado reconocido por el organismo competente.
Las respuestas del SEPE suelen demorar un mes; por lo que no hay que estar reclamando por resultados antes de ese lapso.