Así es como Hacienda controla todo tu dinero y movimientos en efectivo
La autoridad fiscal está al tanto de la gran mayoría de operaciones en metálico y lo hace a través de la declaración de la Renta
Aunque cada vez el uso de efectivo es cada vez menos recurrente tras la pandemia del covid-19 y por las nuevas formas de pago como el contactless, Paypal o Bizum, hay mucha gente que no quiere guardar el dinero en los bancos y decide guardarlo en casa.
Aunque no lo parezca, Hacienda está al tanto de la gran mayoría de movimientos del dinero en efectivo y lo hace a través de la declaración de la Renta. Por ello, es conveniente tener bien declarado el dinero que se retira del cajero para que, si Hacienda pide explicaciones, podamos identificar la fuente de los ingresos que guardamos en casa.
En concreto, Hacienda está al tanto de las operaciones en las que se mueven billetes de 500 euros y de los ingresos y retiradas de efectivo a partir de 3.000 euros, según informa El Economista.
Ley General Tributaria
La Ley General Tributaria regula los principios generales del ordenamiento tributario y la relación entre la administración tributaria y los contribuyentes o sujetos pasivos. Esta ley ordena que las personas jurídicas o físicas «estarán obligadas a proporcionar a la Administración tributaria toda clase de datos, informes, antecedentes y justificantes con trascendencia tributaria» debido a «sus relaciones económicas, profesionales o financieras con otras personas».
Asimismo, dicha ley obliga a las entidades bancarias a informar a informar a la Agencia Tributaria de los movimientos económicos sospechosos que pueda ejercer una persona del uso de dinero en efectivo.
Futuro del efectivo en los pagos
El futuro del efectivo en España está en la cuerda floja y es que los españoles prefieren pagar con tarjeta que en efectivo. Aunque el Banco Central Europeo calculaba en 2020 que los españoles utilizaban el efectivo para más del 80% de sus transacciones, un estudio de Funcas muestra que antes de la irrupción de la pandemia, los españoles ya preferían el pago electrónico o digital (60,17%) sobre el efectivo (30,83%).