Vodafone cambia el “50% para toda la vida” por “50% por tres meses”
El operador de telecomunicaciones finaliza de forma repentina su oferta más agresiva para captar clientes de Movistar
Vodafone España acaba de liquidar su promoción más agresiva. La tarifa de “50% de descuento para toda la vida”, que lanzó a principios de septiembre para robar clientes a Movistar, ha terminado. En su lugar, está disponible una promoción mucho menos atractiva y cuyos beneficios son más fugaces: “50% de descuento por tres meses”.
La actual oferta vende, por ejemplo, el paquete Vodafone One, de 100 megas (que incluye teléfono fijo ilimitado, internet de fibra a 100 megas de velocidad) por 24 euros mensuales. Es decir, 48 euros (IVA incluido) a partir del cuarto mes.
La compañía ha rectificado rápidamente en su agresiva oferta que le supuso un importante número de nuevos abonados, pero que no contuvo la sangría por la retirada de la programación del fútbol. La migración masiva de clientes de Movistar Vodafone supuso un colapso en instalaciones y también en la activación de la televisión. Pero la oferta ha sido insuficiente. Y Vodafone sigue perdiendo clientes.
La oferta más agresiva
Vodafone ha perdido 154.000 suscriptores entre agosto y septiembre, según los datos de portabilidad de la Comisión Nacional del Mercado de las Telecomunicaciones tras renunciar a competir por los mejores partidos del fútbol.
Vodafone aplicó apenas durante un mes su oferta más agresiva en la guerra abierta entre operadores por captar suscriptores. Las promociones más encarnizadas surgieron después de que Vodafone haya mermado su oferta televisiva de fútbol.
La empresa dejó de ofrecer El Partidazo y la Champions tras llegar a la conclusión de que el pago por los derechos televisivos no son rentables en los términos exigidos por la Comisión Nacional de la Competencia (CNC).
Estrategia contraproducente
El propio consejero delegado de Vodafone, Antonio Coimbra, admitió que las ofertas agresivas en el sector hacían mucho daño a la rentabilidad de los operadores de telecomunicaciones.
La caída ha tenido una consecuencia doblemente nefasta para la empresa: pierde clientes y pierde rentabilidad con los nuevos abonados procedentes de Movistar que se beneficiaron del famoso “50% para toda la vida”.
Después del doble fracaso, la compañía asume que no puede retener a un cliente que quiere la programación del fútbol. Se trata de un suscriptor perdido. Ni la mejor oferta es capaz de contener la sangría. Pero Vodafone, en lugar de lamentar la pérdida, asegura que los clientes perdidos no suponían ningún tipo de negocio para la empresa. Les daba pérdidas. Asegura que no hay pena porque se hayan ido a Movistar.
