Un Govern dividido adjudica de forma ‘exprés’ Aigües Ter Llobregat
Agbar solicita la revisión de la oferta económica a la vista de los problemas financieros de su competidor, Acciona
La Generalitat ha tardado 20 días en adjudicar Aigües Ter Llobregat (ATLL), la empresa que se encarga de la gestión del agua desde los pantanos hasta los depósitos de cabecera de los municipios catalanes. La necesidad del Govern de Artur Mas de hacer caja es tal, que este jueves hará público quién se queda con la empresa, Acciona o Agbar, a pesar de la profunda división interna que ha generado este concurso exprés.
Acciona ha obtenido la mejor nota en la valoración inicial de los técnicos del departamento de Territori i Sostenibilitat. La empresa capitaneada por José Manuel Entrecanales ha logrado obtener 87,7 puntos sobre 100 gracias a su oferta económica, frente a los 51 puntos que ha conseguido Agbar, con mejores resultados en el apartado técnico.
Parece ser que el grupo con sede en La Moraleja (Madrid) ha obtenido un apoyo más importante que la evaluación de su oferta, según fuentes conocedoras del proceso de adjudicación. El director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Leonard Carcolé, y el conseller de Territori i Sostenibilitat, Lluís Recoder, han dejado claro su favoritismo por la oferta de Acciona.
División interna
“Lo importante de este concurso es que el precio final del agua sea el más bajo posible para la ciudadanía”, explicaban a Economía Digital hace unos días desde el departamento. Aunque otras fuentes financieras consultadas atribuyen la cercanía a Acciona por otro motivos.
Las tensiones entre Carcolé y el ahora presidente de Agbar, Ángel Simón, durante su larga etapa en la compañía (fue el director en Catalunya y Baleares) son muy conocidas en el mercado. El ahora director de la ACA nunca las ha escondido. Los mismos interlocutores señalan la amistad que existe entre Recoder y el presidente del periódico Ara y vicepresidente del grupo Havas, Ferran Rodés, socio de Entrecanales en su puja por ATLL.
La propuesta de Agbar también tiene sus defensores en el Ejecutivo catalán. Especialmente dentro de la conselleria de Economia i Finances.
Oferta sin costes financieros
La adjudicación exprés de ATLL no sólo ha generado problemas dentro de la Generalitat. Agbar solicitó este miércoles que se revisaran las dos ofertas económicas del concurso y se valoraran de nuevo.
La compañía liderada por Simón se dio cuenta, al repasar los detalles de la propuesta de su competidor, de que los costes financieros de la operación son nulos, tal y como explica en un comunicado. Entrecanales no ha imputado ningún gasto en este sentido durante los 50 años que durará la concesión. Una acción que las mismas fuentes financieras tachan de “temeraria”, especialmente si se tiene en cuenta que hasta anoche Acciona sopesaba solicitar una prórroga de una semana al Govern para poder cerrar la parte financiera de su oferta.
Este extremo desvirtuaría la propuesta de tarifa que le ha posibilitado tomar una mejor posición de partida que su competidor. Y es que el coste financiero implicará forzosamente que tenga que cobrar por metro cúbico más de los 0,7088 euros que Entrecanales propone en la oferta presentada, frente a los 0,79 euros que indició Simón.
Lo único claro del concurso hasta la fecha es que los consumidores catalanes tendrán que pagar más por el agua tras la adjudicación. Ambas propuestas de tarifa se quedan lejos de la tasa actual, que es de 0,38 euros por metro cúbico. Será la segunda subida en este recibo en poco tiempo, ya que en septiembre el agua del área metropolitana ya se incrementó de media el 30%.