El mejor jamón del mundo: de Miguel Bosé a la trama de la carne caducada
La empresa que reetiqueta embutido en mal estado teme que la investigación judicial mate su marca de lujo, antes de Miguel Bosé
El vendedor de los peores jamones de España, productos cárnicos insalubres perseguidos por las autoridades sanitarias, trabaja para que su marca de lujo, que ha ganado el premio del mejor jamón del mundo no termine salpicada por el escándalo.
Valle de los Valfríos, empresa extremeña que ha montado un negocio millonario al reenvasar y reetiquetar productos cárnicos en mal estado como frescos, ha disparado las alarmas porque la investigación judicial podría llegar a su marca más mimada y protegida: Monsalud.
La marca de lujo, creada por Miguel Bosé cuando el cantante decidió entrar en el mundo del jamón ibérico, se vende en los establecimientos de mayor reputación del país.
La marca recibió el reconocimiento del mejor jamón del mundo hace apenas siete años. La Denominación de Origen Protegida Dehesa de Extremadura entregó la Espiga de Oro (primer premio) al jamón Monsalud, producido en Montánchez en 2011.
Miguel Bosé fundó la empresa Brumale de la mano del exfutbolista Manolo Sanchís, el tenista Pato Clavet y el torero Fran Rivera con el propósito de convertirse en una marca de máximo prestigio y conquistar la élite mundial del mercado del jamón ibérico.
Pero la empresa se topó con la crisis y no pudo superar el 2012 con una deuda superior a los cinco millones de euros. “Quisieron acelerar la producción, forzando el proceso de curación. No salió bien y se encontraron con un exceso de producción que el mercado no supo absorber”, explican fuentes cercanas a la compañía.
El del mejor jamón vende productos podridos
La compañía productora entró en concurso de acreedores y finalmente fue comprada por otra empresa extremeña Valle de los Valfríos en octubre del 2017. La compradora, desconocida entre los empresarios reconocidos del sector, está envuelta en una de las mayores tramas de jamón caducado jamás descubierta en España, tal como destapó este diario en exclusiva el mes pasado.
Ahora, sus directivos temen que su marca más mimada, la que compraron a Miguel Bosé y sus socios, quede al margen de toda la investigación para evitar posibles consecuencias comerciales.
Valle de los Valfríos y sus responsables han sido imputados por un juzgado de Fregenal de la Sierra (Badajoz) por un presunto delito contra la salud pública. La empresa recibía jamones, embutidos y productos cárnicos en mal estado con fecha de caducidad cumplida o a punto de cumplirse.
Un trabajador de Valle de los Valfríos ha explicado a Economía Digital que la empresa mantiene dos líneas de producción completamente diferenciadas y separadas. Una es la del mejor jamón del mundo (premio recibido en 2011 cuando pertenecía a Miguel Bosé) y la otra es la de los peores jamones de España, comprados a redes que trafican con alimentos insalubres y que la empresa “maquilla” y “adecenta” para sacar beneficios millonarios, según la investigación judicial.
Valle de los Valfríos es una empresa que ha multiplicado su facturación de forma exponencial en los últimos años. En 2016 alcanzó ventas de más de 9,4 millones de euros. Pero el dinero que mueve la trama del jamón podrido va mucho más allá de esta empresa y alcanza ramificaciones en sociedades pequeñas y medianas. Como administrador único de la sociedad figura Francisco José Cordero Gamero, hermano de un empresario que acumula deudas y conflictos con empresarios del sector.
El jamón adulterado era vendido con la marca Valle de los Valfríos, una marca comercial sin ningún tipo de valor en el mercado. Pero la niña mimada, Monsalud, ahora podría quedar afectada por la investigación que avanza en dos juzgados españoles en Badajoz y Valencia y que ya se ha extendido a Andalucía.